
A una bandera del triunfo
Ecuador debutó en la Copa América Centenario ante Brasil,
Ecuador debutó en la Copa América Centenario ante Brasil, con la estadística de que nunca le había podido ganar al ‘scratch’ en esta competencia. Y ayer, la Tri estuvo cerca. Miler Bolaños marcó el gol, que de haberse validado, le hubiera dado un triunfo histórico a la selección, pero un banderín en alto se lo arrebató.
Sin duda, la jugada de la que todavía se habla fue la de Bolaños. En sociedad con Jefferson Montero, ‘el Killer’ del Gremio disparó antes que la pelota salga en su totalidad por la raya de puerta. No pudo contener el portero Allison e ingresó la pelota al arco de la Verdeamarela. Sin embargo, el juez de línea alzó su bandera y la sonrisa que reflejaba el banquillo tricolor tuvo que cambiar.
Brasil no fue un equipo arrollador, pero tuvo el control de la pelota, mientras que Ecuador intentó aprovechar los espacios del ‘scratch’, pero la imprecisión reinó en los últimos metros.
Ayer no era un buen día para la Copa América. Los encuentros previos a este dejaron mucho que desear, en goles, juego y emociones. Y este compromiso se contagió.
Un estadio amarillo en todos sus rincones. Unos 53.000 asistentes lo mezclaban con verde y otros con el azul y rojo.
Dunga volvió al histórico Rose Bowl de Pasadena, California, en donde alzó la Copa del Mundo en 1994. Su selección -como de costumbre- era la favorita, a pesar de las bajas.
Mientras que Gustavo Quinteros incluyó en su pizarra táctica a Esteban Dreer y Carlos Gruezo.
Ecuador arrancó al puro estilo Quinteros. Intensidad en la presión alta, velocidad por los costados y mucha colaboración en la marca, pero al paso de los minutos Brasil se acomodó y le quitó el entusiasmo a los tricolores.
Con un partido impecable de Casemiro, en el corte de circuitos, los pentacampeones ganaron el medio campo. Sí, tenían poca profundidad, pero el adelantamiento de líneas de Ecuador dejó espacios, que los brasileños gozaron, pero no aprovecharon.
Los laterales tuvieron un rol que les privó sumarse al ataque. Juan Carlos Paredes conteniendo a Filipe Luis y Willian que tuvo un duelo personal con Walter Ayoví, en el que el velocista de la Canarinha ganó casi siempre.
Este era el sector más influyente de los brasileños, tanto así que desde allí nació en una jugada que Dreer -in extremis- tuvo que enviar al córner.
Ecuador cedió terreno y Brasil se impuso. Se apeló a destellos individuales como los de Miler Bolaños, Antonio Valencia y hasta el mismo Christian Noboa, pero no generaron mayor peligro.
Iniciaba la segunda etapa y la tradicional ola se tomaba al escenario estadounidense.
Ecuador reflejó desde el pitido inicial que quería hacerle daño a Brasil. Mostró los mismos síntomas que en la primera parte, esta vez no tan adelantado y con el detalle de que los laterales sí se sumen al ataque.
Pero los dirigidos por Gustavo Quinteros podían diseñar jugadas hasta tres cuartos de cancha. Pero la imprecisión se tomó siempre el toque decisivo cerca del área rival.
Ecuador terminó totalmente replegado, con la idea de buscar una oportunidad para abrir el marcador, en un contragolpe a pura velocidad. Pero aquello no sucedió. La Tri se queda con un punto y un próximo rival que lidera el grupo B: Perú.