Baipases tributarios

El Ejecutivo vetó un proyecto de ley sobre personas adultas mayores, en el que la Asamblea planteaba dos reformas a los beneficios tributarios actualmente existentes: primero, exonerar de impuestos administrados por el SRI a personas de bajos ingresos que sean mayores de 65 años; y segundo, incluir entre los gastos deducibles del impuesto a la renta a las donaciones para entidades que brindan atención a las personas adultas mayores (art. 14).

El problema es que esos cambios jamás fueron propuestos por el Ejecutivo. Fueron metidos a las bravas: uno en la comisión del asambleísta Jorge Corozo (informe para primer debate); otro en el segundo debate.

El presidente Moreno vetó esas propuestas argumentando violación al art. 301 de la Constitución, que reserva a la iniciativa del Ejecutivo la presentación de proyectos de ley para “establecer, modificar, exonerar o extinguir impuestos”. Las objeciones por inconstitucionalidad deben ser analizadas por la Corte Constitucional (Constitución, art. 139).

La nueva Corte Constitucional, en decisión aprobada el pasado 12 de marzo, confirmó el veto presidencial diciendo que los dos antedichos pretendidos cambios son inconstitucionales por la forma “puesto que el procedimiento legislativo no contó con iniciativa presidencial”. Se ha comenzado, así, por fin a poner coto a las vivezas criollas, hiperarraigadas en el paisito y más que nada en el correísmo, consistentes en aprobar de agache, en reformas tributarias, normas que no habían sido planteadas por el Ejecutivo y que a veces, como en este caso, ni siquiera habían sido discutidas en dos debates, como también exige el art. 137 de la Constitución. El exasambleísta Virgilio Hernández sabe bastante de estos baipases.

Esta decisión de la Corte Constitucional es campanazo para que el Ejecutivo sea muy prolijo al preparar el proyecto de la nueva reforma tributaria que debe enviarse, para aprobación legislativa, en el marco de los acuerdos con el FMI. Ya sabemos qué puede pasar con las inclusiones de última hora dirigidas a conseguir respaldos. La guerra está avisada.