Rererencial. Este banco sigue siendo investigado por sus operaciones ilícitas.

Andorra, refugio de corruptos

El sigilo bancario sirve de escondite a quien se enriquece de forma ilícita. El Estado europeo levanta la opacidad ante clientes, incluidos de Ecuador, implicados en Odebrecht.

Desde Europa llegan nuevas pruebas contundentes sobre el mayor escándalo de corrupción de América Latina. La Banca Privada d’Andorra (BPA) obvió los protocolos de prevención de blanqueo para permitir que decenas de sus clientes cobraran millonarias comisiones ilegales de Odebrecht, el gigante brasileño de la construcción que ha protagonizado la trama de sobornos.

La entidad del país europeo permitió que altos funcionarios, políticos y cargos de la administración de ocho países de Latinoamérica recibieran transferencias millonarias de Odebrecht, entre ellos, el exministro ecuatoriano Alecksey Mosquera a quien se le atribuyen pagos por un millón de dólares.

Las transacciones se completaban “pese a los indicios que las desaconsejaban o la falta de soportes justificativos”, según un informe confidencial de la policía de Andorra al que ha tenido acceso EL PAÍS.

El documento, fechado el pasado 11 de abril, forma parte de la investigación de la jueza andorrana Canòlich Mingorance, que rastrea 200 millones de dólares en sobornos a 145 clientes de este banco.

Cuando la macrotrama afloró en junio de 2015, la entidad permitió que los clientes vinculados a la contratista “retiraran sus fondos”. La BPA “no denunció” y “enterró el tema”, según un informe que atribuye al banco “obviar parámetros importantes y de seguridad por lo que respecta a la procedencia del dinero”.

La policía es así de tajante tras examinar decenas de actas confidenciales del departamento de compliance (cumplimiento), la unidad de la BPA dedicada a prevenir el blanqueo. Y concluye que solo a partir de 2013, la entidad extremó las cautelas sobre las operaciones controvertidas vinculadas a Odebrecht.

El banco aprobó antes de 2013 transferencias de la contratista a clientes que debieron estar bajo vigilancia por su nexo con la adjudicación de obra pública, principal fuente de ingresos de Odebrecht.

Una de las incógnitas que aún perturba a la policía de Andorra es saber quién está detrás de una decena de cuentas en la BPA que recibió un total de 62 millones de dólares de la madeja de sociedades de Odebrecht. Los investigadores aún están esperando respuesta del banco que fue intervenido en 2015.

Ecuador

Mosquera (Ecuador)

Alecksey Mosquera, ministro de Electricidad con el expresidente de Ecuador Rafael Correa, abrió en 2011 una cuenta en Banca Privada d’Andorra (BPA), donde cobró una comisión de un millón de dólares de Odebrecht.

Endara (Ecuador)

Tres empresas panameñas del empresario Marcelo Raúl Endara Montenegro movieron un millón de dólares de Klienfield, que fueron a la cuenta de Mosquera.

Perú

El exvicepresidente de la estatal Petróleos, Miguel Atala Herrera, declaró a la Banca Privada d’Andorra (BPA) en 2007 su intención de ingresar de uno a $ 10 millones de dólares. Dijo que procedía de negocios agrícolas, inmobiliarios y textiles.

Panamá

Odebrecht pagó $ 2,1 millones a los padres de Demetrio Papadimitriu, exjefe de campaña del expresidente Martinelli. Se les vincula la empresa Glexus, de Belice.

Uruguay

Este informe de la policía concluye que el antiguo responsable del banco andorrano en Uruguay, Andrés Norberto Sanguinetti Barros, alias Betingo, fue ‘clave’ en la creación de la alambicada madeja que tejió Odebrecht para pagar sobornos.

Colombia

A través de la sociedad offshore Kingstall se pagó soborno del exministro García Morales que adjudicó una carretera a Odebrecht. La cuenta tenía $ 12 millones.

Chile

Saldo previsto en el banco andorrano de León Mozes Libedisnky que recibía pagos de Odebrecht en una offshore en Belice.