El ambiente divide a PAIS

El ambiente divide a PAIS

Los asambleístas de Alianza PAIS estaban divididos por las peleas de gallos y las corridas de toros. Un grupo estaba a favor de que esas actividades sean permitidas en los cantones en donde ganó la consulta popular de 2011 que dio vía libre a esas trad

Marcia Arregui, legisladora de PAIS por Los Ríos, salió del plenario e increpó con voz fuerte a Carlos Viteri, su colega y presidente de la Comisión de Biodiversidad.

Ayer ella reclamaba por un supuesto cambio, a última hora, en el texto del Código del Ambiente elaborado por esa comisión y que debía votarse en la Asamblea Nacional.

Los asambleístas de Alianza PAIS estaban divididos por las peleas de gallos y las corridas de toros. Un grupo estaba a favor de que esas actividades sean permitidas en los cantones en donde ganó la consulta popular de 2011 que dio vía libre a esas tradiciones y costumbres. Otro grupo se oponía a esas prácticas, respaldando una posición que ha sido abanderada por las organizaciones defensoras del ambiente y de los animales.

Arregui está en el primer grupo porque en su natal Los Ríos las peleas de gallos y los toros populares tienen acogida. “La Comisión modificó algunos artículos cuando ya habíamos acordado algo”, dijo a EXPRESO.

Pero ella no era la única enojada. Hubo muchos otros, contaron los legisladores de la mayoría parlamentaria, que la apoyaron y pidieron respeto a sus ideas.

Por ese desacuerdo se suspendió la sesión en la que se debía votar el Código. No es la primera vez que PAIS recurre a esta estrategia cuando tiene problemas internos que resolver.

En este caso, los oficialistas se retiraron a deliberar en privado. Anunciaron que la sesión se retomaría a las 12:00, pero a esa hora tampoco salió humo blanco y nuevamente suspendieron la sesión.

Esto ocurría mientras los legisladores de las bancadas de oposición esperaban en el hemiciclo y miraban las curules vacías del oficialismo. Luis Tapia, independiente, reclamó porque “PAIS tiene que respetar la decisión popular, no puede terminar con las tradiciones de las provincias”.

Bayron Pacheco, de Avanza, criticó que al oficialismo “le preocupan mucho las peleas de gallos y corridas de toros, pero la agresión de un funcionario a una mujer queda en el aire”.

Afuera de la Asamblea se replicaba la división. Varias organizaciones con carteles de la Asociación de Galleros de Quito o de los antitaurinos aguardaban por la aprobación del proyecto. Los primeros defendían las peleas de gallos, las corridas de toros y los rodeos montuvios. “Hay que respetar las libertades y tradiciones. El gusto no se legisla”, comentó David Espinosa, representante de los taurinos. Los segundos exigían respeto y protección para los animales, explicó Sandra Rivera.

Por la tarde, Arregui contó a este Diario que el desacuerdo en PAIS fue superado y el texto, ahora sí, está listo para votación. “Las corridas y peleas van en las provincias donde la gente se pronunció por ellas”, afirmó.