Editoriales

Una salida a la crisis

'La crisis obliga a buscar opciones inmediatas para conseguir dinero y evitar el desabastecimiento en los mercados, surgidos por los distintos problemas de movilidad’.

Ayer parecía un lunes normal, pese a la pandemia del coronavirus. Cientos de vehículos congestionaron el tránsito en el Puente de la Unidad Nacional, que comunica a Guayaquil con los cantones Samborondón y Durán, pese a las restricciones de movilidad impuestas por el Gobierno.

Los únicos autorizados para circular eran aquellos cuyas placas terminaban en 1 y 2, pero esto no ocurrió durante la mañana. Al menos una hora tomó a los conductores de todo tipo de carros pasar por el control, en el que los agentes revisaban los salvoconductos, cuyas solicitudes para adquirirlos se han duplicado en los últimos días. Este es un indicador que no se puede pasar por alto, ya que evidencia la necesidad de la ciudadanía de reactivar la producción, en una economía que ya no soporta improvisaciones.

La crisis obliga a buscar opciones para conseguir dinero y evitar el desabastecimiento en los mercados, surgidos por los distintos problemas de movilidad. Es urgente que se adopten decisiones sobre los sectores productivos que podrían reiniciar operaciones, tomando todas las precauciones sanitarias.

Por ello se necesita el acompañamiento de los diversos sectores gubernamentales, pero también el compromiso de la sociedad de respetar las normas impuestas por el bien de todos.