Desatención total
El Gobierno central no puede seguir escudándose en la pandemia ante las quejas por la ineficiente atención de los demandantes de cédulas, pasaportes, licencias y medicinas’.
La angustiosa espera por un turno para obtener documentos como cédulas, pasaportes y licencias de conducir, o recibir asistencia médica y farmacológica en una casa de salud, o hacer un trámite en el Seguro Social, alcanza niveles inaceptables que muestran la ineficiencia absoluta de un Estado fallido e indiferente, que ha retrocedido en atención y servicios.
Es inadmisible que con todos los recursos tecnológicos disponibles se obligue a los ciudadanos a un peregrinaje insultante desde el ingreso a las páginas web de las entidades públicas como IESS, Registro Civil, Agencia Nacional de Tránsito, Seguro Social, porque no hay cupos para la atención en los siguientes días, semanas o meses. Los responsables de las entidades gubernamentales no pueden seguir echándole la culpa a la pandemia, porque su desidia y la de sus dirigidos es la que está obligando a los ciudadanos a viajar a otras ciudades, fuera de Quito y Guayaquil, para obtener sus documentos personales.
La atención a los usuarios no admite espera ni la tozuda dejadez estatal, que frena el desarrollo del país. El Gobierno central tiene que responder por la ineptitud de los funcionarios y atender con prontitud a la población demandante.