La puerta de salida

Putin está cada vez más acorralado por el mundo; parecería con su cara de póker pedir una salida digna, o sus últimas palabras serán ‘acá volamos todos’
Al escribir esta columna, los rusos siguen tratando de aplacar la resistencia ucraniana, sin haberlo logrado. Las operaciones en el terreno dejaron ver las grietas de un ejército que lucía mejor en el papel.
Occidente, a un costo altísimo para sí, ha impuesto medidas económicas con el ánimo de persuadir a Putin para que no continúe con una guerra en la que todos perderemos, y Putin cada vez se va acorralando en la esquina donde tendrá pocas alternativas sin perder su propia cabeza. Evidentemente Rusia no podrá sostener eco-nómicamente por mucho más tiempo una invasión, como tampoco Occidente puede in-definidamente mantener medidas que van a golpear muy duramente las economías de sus países.
Se le atribuye a Sun Tzu, aquel mítico general chino que dominaba el arte de la guerra, que la batalla perfecta es aquella que se gana sin pelear. En este punto de la historia, ya el nuevo campo de batalla no es solo Ucrania, sino la recuperación mundial luego de la pandemia, y en el escenario apocalíptico que no escapa de las alternativas de un desquiciado, una guerra nuclear.
Evitar el peor escenario solo será posible si es que Putin dispone de una salida "digna" al lío que ha armado. No parecería que está dispuesto a doblegarlo la opinión universal, tanto como las medidas que empiezan a golpear a los ciudadanos rusos en su vida diaria. No parece doblegar a un autoritario la opinión pública de su país, cada vez menos dispuesta a aceptar sucumbir por los caprichos de un loco.
Parecería que la única posibilidad real es que un personaje que seguramente se está frotando las manos al ver cómo se debilitan sus contendores, entre en escena: Xi Jinping, el presidente chino.
China parece ser el único interlocutor que puede convencer a Putin de que "ya fue suficiente". No lo hará por noble, lo hará porque la paz es esencial para China. Rusia importa $ 54 millardos de China, y le exporta apenas $ 6,4 millardos. Por otra parte, esta es una oportunidad de oro para que China se gane el aplauso universal por mostrarse "sensata". Ojalá China le ofrezca la puerta de salida, y Putin pase por ella.