Martín Pallares | Puro chanchullo para meter mano a la justicia

Y no sería raro que se llegue a extrañar incluso a alias ‘Diablo’, Wilson Terán
Si la metida de mano a la justicia llega a concretarse, tal como ha sido planificada por uno de los más retorcidos correístas de la historia del correísmo y que ahora trabaja para el Gobierno, Fausto Jarrín Terán, el país va a terminar extrañando aquel siniestro Consejo de la Judicatura del correato de Gustavo Jahlk, Pablo Rodríguez y Fernando Yávar. Y no sería raro que se llegue a extrañar incluso a alias ‘Diablo’, Wilson Terán. Lo que se viene puede ser siniestro. Lo del jueves por la noche, por ejemplo, es demencial. Resulta que el juez Fabián Fabara, una de las fichas que el operador Jarrín tiene para poner en marcha su operativo (entró de forma ilegal en la terna de la Asamblea para el CJ) acaba de quedar habilitado por el CJ para ser vocal de ese organismo, a pesar de que se le estaba siguiendo un sumario por casos graves. Pero resulta que el propio CJ, presidido por Mario Godoy, que se supone tenía que llevar adelante el sumario, lo salvó para que siga siendo candidato al organismo, pero no porque se haya probado su inocencia, sino porque el CJ, que se suponía tenía que juzgarlo, hizo todo para que el caso prescriba. Fabara había enviado a la dirección de asuntos disciplinarios del CJ un escrito pidiendo ser escuchado para defenderse, pero nunca se le contestó porque, como se va a ver, esa negligencia estaba fríamente calculada. Como no le contestaron, Fabara volvió a presentar otro escrito pidiendo la anulación del expediente y el jueves, cuando prescribía su sumario, el CJ decide que, como no habían recibido a Fabara, el pedido tenía que pasar al área técnica para que resuelva el caso. Y aquí está la puerca trampa: para cuando vuelva al área técnica, el caso ya habrá prescrito. Así, Fabara puede ser perfectamente miembro del Consejo de la Judicatura. Eso es, en realidad, una ofensa para el país: Fabara será miembro del CJ pese a que no solo estaba siendo sumariado sino que ha sido célebre por estar metido en temas de corrupción: fue uno de los que recibió cheques en el sonado caso Peñaranda. Además, luego fue ficha del correísmo y de Gustavo Jahlk para la metida de mano de Rafael Correa en la justicia. Igual que ahora para el noboísmo.
Si están haciendo tamañas porquerías para que gente como Fabara califique para el CJ es porque tienen en carpeta porquerías mucho mayores para que gente como él las ejecute.