Fausto Ortiz | El elefante en la habitación

El elefante en la habitación tiene nombre y apellido. Se llama Subsidio a las pensiones de la Seguridad Social
En la parte fiscal contamos con información muy actualizada que vale la pena aprovecharla.
Han transcurrido siete meses del año. Sería normal revisar la ejecución fiscal y encontrar que esta se ubique cerca del 60 %. De hecho, la recaudación de impuestos hasta julio de 2025 representa el 63 % de lo presupuestado para todo el año, IVA muy bien, y el impuesto a la renta peleándola para igualar la muy buena ejecutoria del año anterior. Otros ingresos no tributarios en los cuales se registra petróleo llevan una ejecución por debajo del 38 % y no es tanto porque los ingresos se han caído -el crudo ecuatoriano en estos siete meses del año no supera los USD 61 dólares, cuando el año pasado estaba arriba de USD 72 - o por la caída de la producción, es más porque los ingresos presupuestados al inicio del año lucen elevados en ventas de activos no financieros y petróleo. Elevada la base, y normal la ejecución, el porcentaje ejecutado quedará bajo. Esta es la manera como en Finanzas desde años atrás se las han venido ingeniando para que no quede un gran déficit fiscal al momento de presentar la Proforma a una Asamblea que le ‘exige’ la inclusión de incremento en Salud y Educación para cumplir norma Constitucional.
Por el lado del gasto, la nómina va muy puntual en su gasto (57 %), pero Intereses (77 %) y Transferencias corrientes (70 %) elevados. Esa ejecución haría que más de uno diga que estamos frente a gastos desbocados, cuando en realidad ocurre lo mismo reseñado para Ingresos. Al momento de armar la proforma ciertos gastos se los ha preferido dejar en tamaños relativamente pequeños para darle espacio presupuestario a Salud y Educación que terminan no gastándose. Bajada la base, y normal ejecución, el porcentaje ejecutado quedará alto.
Prestemos atención con mayor detalle a las transferencias corrientes por el 40 % a la Seguridad Social para atender Jubilaciones.
En el presupuesto prorrogado constan USD 1.659 millones (M) como Contribuciones del 40 % a las Pensiones pagadas por el Seguro Social. A la fecha se han ‘devengado’ USD 1.548M que representan el 93 %. Claramente el valor presupuestado se quedó corto.
Existen también otros USD 660M que asigna el Estado para las pensiones del ISSFA e ISSPOL y su ejecución (57,7 %) es normal.
El elefante en la habitación tiene nombre y apellido. Se llama Subsidio a las pensiones de la Seguridad Social. Es un gasto insostenible y minimiza cualquier esfuerzo de recorte de otros gastos corrientes.
Frente al PIB, en la actualidad, representa más de la mitad de lo que representa la nómina pública y crece a mayor ritmo. Va a ser importante que se insista en solucionarlo con una serie de medidas.
Sirve hacer el esfuerzo por incrementar el empleo que ha manifestado el Gobierno, en temas administrativos, quizás ampliar el plazo de mejores años para calcular la jubilación, podría contribuir.
Otras medidas, aunque sea, para que entren en vigor en cinco o diez años servirán para darle futuro al IESS y al fisco.
Mirar para otro lado cada vez va siendo una mala estrategia, en algún momento se nos presentará el problema en su real tamaño y será muy complicado moverse ágilmente para atender al resto dentro de la habitación.