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Temblor

Avatar del Luis Sarrazín

¿Habrá algún método que nos libre de estos engendros?

Es un tema casi generalizado el hacer comentarios sobre el temblor que tuvimos que soportar el día sábado, movimiento telúrico de importantes proporciones, al haberse sentido en 18 provincias del país, en donde se registraron daños de diversa magnitud e intensidad.

Parecería que estamos inmersos en un período de temblores de índole variada a nivel mundial ante la serie de estos eventos en diferentes regiones del globo, que afectan no solamente las infraestructuras en diferentes países, sino que atentan contra la salud, tanto biológica como financiera de sus poblaciones, en donde se registra el descalabro de instituciones de grandes capitales que por diversas circunstancias se encuentran hoy enfrentando gravísimas crisis de solvencia y operatividad.

Debemos mencionar también, los temblores ideológicos y políticos que estamos viviendo en los momentos actuales, que han servido para desnudar las verdaderas intenciones de ciertos asambleístas, los cuales se muestran desvergonzadamente como lo que son; es decir, seres despreciables, casi analfabetos, carentes de intelecto político y al mismo tiempo seudolegisladores delirantes, que cual hienas famélicas se lanzan víctimas de delirios depredadores con ansias de satisfacer sus patológicos apetitos, sin importarles el país y la existencia de mandatos constitucionales, así como preceptos democráticos, que todo buen ciudadano debe aprender a observar y respetar, y que este grupo de trogloditas hambreados quieren avasallar y destruir a toda costa.

La ausencia de fosfo-galacto-lípidos, presentes solo en la leche materna, y que no recibieron muchos de estos asambleístas que fueron alimentados con leche de tarro -leche de vaca en polvo-, hizo que su cerebro se desarrollase como el de los terneros y por eso hoy, en los momentos actuales, reaccionan constantemente al igual que un cuadrúpedo astado, destrozando principios, mandatos y pisoteando la Constitución y las leyes a su antojo, y haciendo gala de sus insaciables así como abominables ansias de poder a cualquier precio.

¿Habrá algún método que nos libre de estos engendros?

Y sigo andando…