La teoría del “mal menor”

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Ha sucedido pues, que la señora Muñoz (que tiene exactamente el mismo nombre de la segunda vice)...

Un hecho sin precedentes no solo en nuestra historia sino en el resto de países del mundo con gobiernos democráticos es el que se haya producido sucesivamente la designación de cuatro vicepresidentes en un solo período presidencial, lo cual de cierta manera exigiría que esta suma de segundos mandatarios en el Ecuador conste en el libro de Récords Guinness.

Esta sucesión de “vices”, luego de haber dejado atrás a Jorge Glas cumpliendo una sentencia carcelaria de 6 años; a María Alejandra Vicuña, también en manos de la justicia, acusada del delito de concusión por los diezmos cobrados mientras era legisladora; y Otto Sonnenholzner, que hizo ‘mutis’ por el foro al inicio de este mes juliano, dicen que para dedicarse a su campaña electoral (¿con el apoyo socialcristiano según se rumora?), hizo que la Asamblea fuera convocada para el viernes pasado con el objeto de recibir la terna que le envió Lenín y designar a la persona que debería desempeñar el cargo que antes habían ocupado ciudadano de alto prestigio, como Abel Gilbert Pontón y Jorge Zavala Baquerizo.

Se supone que Moreno esperaba que este trío de candidatos sea rechazado sin conseguir los necesarios votos que exige la ley y que al no tener resultado alguno hasta el próximo 10 de agosto, entrase directamente, por el ministerio de la ley, a la vicepresidencia doña María Paula Romo. Sin embargo, los llamados en antaño “padres de la patria” dieron la gran sorpresa y ese mismo viernes, tras descartar con sus votos en contra a la misma María Paula y a Juan Sebastián Roldán, se decidieron por lo que consideraron el “mal menor”, eligiendo como sucesor de Otto a María Alejandra Muñoz, una guayaquileña de 41 años que también, como sus dos acompañantes de terna, tenía antecedentes de ejercicio en la función pública. Se espera que la designada complete los 10 meses que le quedan, hasta el 24 de mayo, y que no haya que designar nuevamente a otro sucesor, por mucho que algunos sean partidarios de la vieja frase popular que dice que “no hay quinto malo”.

Ha sucedido pues, que la señora Muñoz (que tiene exactamente el mismo nombre de la segunda vice), y que será posesionada hoy por la Asamblea, fue postulada solo para completar la terna, y sin embargo, salió premiada con el “número mayor”.