Oración por la paz

Entonemos juntos un canto a la paz, sin que nuestras voces silencien jamás. ¡Qué importa el idioma, creencia o color, si todos ansiamos un mundo mejor!. Los grandes, los chicos y hasta los ancianos, juntos de la mano por el mundo vamos y es nuestra consigna poder tapizar, con emblemas blancos: aire, tierra y mar. En ciertos lugares la paz es un mito, las hostilidades se han tornado un rito, tan solo se aspiran efluvios letales y los niños juegan con armas letales. Allí donde, a diario, la muerte campea y la incertidumbre cruel se enseñorea, la vida del hombre pierde su vigencia y el horror se mira con indiferencia. La paz es eslogan rancio y manoseado y, por los políticos muy parafraseado, falsa y consabida oferta de campaña, que jamás se cumple, solo es vil patraña. La violencia engendra más y más violencia y nos hace presas de la prepotencia; salvemos entonces al mundo futuro que hoy está convulso, triste e inseguro. Por ello entonemos un canto a la paz y que las rencillas se queden atrás para, aglutinados en un corazón, vencer a la guerra de la sinrazón. Enfrentemos juntos la recia batalla que nuestras ideas sean la metralla, con que derrotemos al mundo falaz, hasta hacer del mismo un edén de paz.

Lic. Fabiola Carrera Alemán