La narcopolítica
Hay que sufragar bien pese a la presunta alianza entre narcotráfico y políticos tradicionales sobornados que ponen candidatos de imagen e intereses secretos, familiares de investigados y condenados por corrupción.
Esta y la parapolítica, no son nada nuevo en Colombia o México; en Ecuador aparentemente sí. Los narcotraficantes en su afán de que no los repriman y tener el mando en las estructuras políticas de poder, apoyan económicamente a candidatos, pero ahora ellos mismos, directamente ponen candidatos, financian sus campañas y en sus cargos ya no responden a los intereses de la ciudadanía, sino a los de las organizaciones narcotraficantes y estructuras delictivas. Tras un pasado triste de denuncias sobre fraudes y anomalías electorales y críticas al CNE, nuevamente vamos a las urnas en febrero. Pero esta vez la amenaza de la presencia de la narcopolítica es mayor y peligrosa. El papel fundamental de la narcopolítica es impedir que se repriman las actividades de narcotraficantes, blindar que se creen normas legislativas duras y fuertes contra el narcotráfico, tráfico de armas y explosivos, lavado de activos, sicariato al servicio de la narcopolítica, enriquecimiento ilícito; impedir que FF. AA.. apoyen a la Policía en la represión contra las drogas; apoyar decisiones legales o administrativas a favor del mantenimiento de la tabla de porte de droga; apoyar el indulto o perdón político a violadores de la ley. Hay que sufragar bien pese a la presunta alianza entre narcotráfico y políticos tradicionales sobornados que ponen candidatos de imagen e intereses secretos, familiares de investigados y condenados por corrupción.
Dr. Franklin Salazar Savinovich