Exijamos transparencia

Es hora de acabar con los aventureros que cambian de camiseta y medran de la política, que recurren a componendas -exentas de ideología coherente con las demandas ciudadanas- y a campañas mentirosas que distraen y confunden al electorado

¡Qué gente para fea!, es la expresión que utiliza el ciudadano de a pie -consciente de la realidad que atraviesa el país- para referirse a los cínicos asambleístas, a los politiqueros farsantes, a los nuevos ricos atracadores de fondos públicos, y a otros demonios. Si la normativa que rige al Consejo Nacional Electoral (CNE) no logra tamizar adecuadamente la idoneidad de candidatos que participarán en las seccionales que se avecinan, pues vemos algunos impresentables cuyo currículo se asemeja más a un prontuario delincuencial, que a una hoja de vida que refleje formación y trayectoria pertinentes, son los medios informativos del país, los llamados a asumir la responsabilidad de realizar rigurosas entrevistas (sin cuestionario previamente pactado) y promocionar debates, exigiendo exponer planes de trabajo con el debido sustento para su cumplimento, lo cual contribuiría a que la ciudadanía conozca y mida el nivel de seriedad y conocimiento, y pueda decidir su voto por la mejor opción. Confiamos en que el CNE blinde oportunamente la seguridad de su sistema informático para evitar que se cometan fraudes, como se han dado en los últimos años, y se obtenga resultados transparentes que convienen al país entero. Es hora de acabar con los aventureros que cambian de camiseta y medran de la política, que recurren a componendas -exentas de ideología coherente con las demandas ciudadanas- y a campañas mentirosas que distraen y confunden al electorado, con el único afán de alcanzar representaciones u ocupar cargos públicos, y así llegar a las arcas públicas para lograr su objetivo mayor: ¡atracar!

Leonardo Cueva Piedra