Espiritualidad social

Espiritualidad y religiosidad son dos cosas distintas.

Jesús dijo que a los cristianos se los conocería por sus actitudes con sus familiares, vecinos o compañeros de trabajo (Gálatas 5 y 6). 

Cuando se entabla una verdadera relación espiritual con Dios (no solo religiosa) la mente se transforma y podemos cambiar nuestro modo de vida social. Espiritualidad y religiosidad son dos cosas distintas. 

Buenas acciones (frutos) son las que debemos practicar a diario, sin tantas apariencias religiosas (Colosenses 2:16). El cumplimiento de ritos, tradiciones o costumbres religiosas (al estilo fariseo) son secundarios y accesorios; lo espiritual es lo que tiene efectos mentales y sociales.

                

Miguel Ulloa Paredes