Contralor de lujo

En un video, el expresidente Correa, en un salón abarrotado de fanáticos, explica emocionado cómo se debe servir a la patria siendo honrado, señala a un ciudadano y exclama: “y aquí les presento a nuestro contralor de lujo, ejemplo de presentes y futuras generaciones”. El público llora emocionado y dirige sus miradas al hombre objeto de elogios: Carlos Pólit. Él sonríe nerviosamente, al fin el merecido reconocimiento a su puntaje de 100 sobre 100 que el Consejo de Participación Ciudadana le otorgó con justicia y extendió su ejemplar mandato a 15 años. En alarde de generosidad perdona la prisión a la Comisión Anticorrupción que lo tachó de corrupto por su intervención en la virtual Refinería del Pacífico y les retiró los cargos por calumnia: a más de honesto y puro era también magnánimo. El “lujo” de Correa huyó a EE.UU. diciendo que estaba enfermo e inmediatamente repartió utilidades entre sus compinches correístas. Solo entre 2010 y 2016 recibió 10,1 millones de Odebrecht. Lo que no sospechó es que la justicia de EE.UU. le seguía los pasos. Los sobornos fueron lavados en compra de bienes raíces, tintorerías y restaurantes en La Florida. El abogado de Pólit declaró que su protegido tiene $ 15 millones en activos solo de Odebrecht y Seguros Sucre. Una residencia en Coral Gables mejorada que vendió en $ 4,1 millones y en un edificio exclusivo compró $ 2,6 millones en oficinas. ‘Lujo’ se acogerá a la colaboración voluntaria y chismeará a quien nomás hizo rico. El país cansado de jueces ladrones, motines, pactos, expulsiones, ‘habeas corpus’, sicariatos y comisiones chuecas, respira aliviado: un problema menos.

Dr. Carlos Mosquera B.