Ocio

Maricela Gómez y su familia
Maricela Gómez y su familiaCortesía

Maricela Gómez, su hija menor se prepara para el noviciado

Franccesca, la última hija de la actriz, celebró 21 años de vida junto a su familia. La joven pertenece a la congregación de Murialdinas de San José

Próxima a recibirse como novicia, para luego tomar los hábitos, Franccesca, la última hija de la actriz Maricela Gómez, celebró 21 años de vida junto a su familia. Llegó desde Quito, donde actualmente estudia en la universidad para el prenoviciado.

Cumplir años es obra de un milagro ya que, al nacer, se le detectó un problema cardíaco llamado ‘anómalo total de retorno venoso pulmonar’, una condición grave y crónica que necesitó cirugía de corazón abierto.

Al no poder operarla en el país, Maricela viajó a Chile, acompañada solo de su hija de tres años. El doctor que la atendió le dijo que la niña no viviría. Maricela recuerda que el médico era ateo y sin dejar su fe de lado le respondió que Dios obraría por ella, recibiendo como respuesta una sonrisa. La cirugía duró ocho horas, pero se complicó y volvieron a abrir el pecho de Fran. Luego de mes y medio estaban de regreso en Ecuador.

Shakira

Shakira ya tiene día mundial

Leer más
Franccesca
FranccescaCortesía

Dos años después a la niña se le presentó otro problema y volvieron a Chile. Las atendió el mismo doctor, quien nuevamente le advirtió que su hija moriría en cualquier momento, porque se le estaban cerrando unos ductos del corazón. “Apostamos que si ella salía bien de una resonancia, él iría a la iglesia y yo no volvería. No se trató de una competencia, sino de la mano misericordiosa de Dios. La niña salió adelante. Pero mira cómo Dios prepara los caminos, seis meses después de regresar recibí la llamada de la esposa del doctor, quien me comentó que había muerto por una isquemia cerebral grave y que, gracias a todo lo que había pasado con Fran, él había vuelto a la iglesia”, relata una calmada Maricela.

La protagonista y partícipe de seriados nacionales dice no saber si todo ese recorrido para salvarle la vida llevaron a su hija hacia el camino religioso. Lo cierto es que desde pequeñita le decía a su mamá que veía a la Virgen y le pedía que rezara el rosario.

“Siempre me decía que ella iba a ser monjita, hasta los 6 años me repetía lo mismo. Me contaba que la Virgen le decía ‘ven conmigo’, pero como estaba pequeña se distraía bailando, pintando y haciendo otras actividades, incluso decía que quería casarse y tener hijos”, relata Gómez, quien es fiel creyente en Dios.

Sin embargo, Franccesca, quien pertenece a las Murialdinas de San José, congregación que tiene conventos en diferentes ciudades y países, comenta que Dios es tan bueno con ella que no le mandó los cinco hijos que quería tener, sino millones de ellos.

Las religiosas ponen en práctica desde el día uno su vocación, que se acrecienta cuando empiezan a trabajar en el servicio humanitario. En Ambato tienen una fundación donde laboran con niños a los que les dan de comer, les ponen al día los cuadernos, les enseñan manualidades, los ayudan en lo que desconocen, además de enseñarles el amor a Dios.

También se mantienen en el servicio del silencio. La joven, quien desde hace tres años entró al mundo de la religión, hizo un diplomado en Teología. A los 18 años dejó el preuniversitario y se despidió de su familia anunciando que se iría a Ambato, siguiendo su vocación.

J Balvin

J Balvin pela los dientes con Usher y DJ Khaled

Leer más
Franccesca
Franccesca.Cortesía

Aunque años atrás tuvo que regresar al quirófano para corregir un problema que no la dejaba crecer ni engordar, Franccesca lleva una vida normal. Su corazón late duro y fuerte.

Maricela, quien además es psicóloga y madre de otras dos hijas, nunca perdió las esperanzas de tenerla con ella. “Dios siempre estuvo con su mano maravillosa sobre ella, siempre la ha tocado. En el 2020 casi me muero con COVID y ella nunca se contagió. Gracias a Dios está bien fortalecida”, dice emocionada al contar la historia que podría ser catalogada como un milagro de vida.