Cultura

Intercultural_Patrimonio_Azuay
Panorama. En lo alto de una cumbre están las dos grutas para visitar.Jaime Marín / Expreso

San Lucas de Llacao y el turismo al aire libre

Una localidad rural se propone como alternativa de visitas en Azuay

El aire puro y la naturaleza, recorrido por el Camino del Inca, junto a la meseta de la Pachamama, es una propuesta turística que presentan los nativos y las autoridades de la parroquia rural de San Lucas de Llacao, en Cuenca. Está ubicada al noreste de la capital azuaya, y a 20 kilómetros del centro urbano.

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El recorrido parte de la iglesia, construida en 1953 y donde se venera a su patrono San Lucas. Está rodeada de viviendas de construcción antigua, adobe, teja, bahareque y barro, lo que constituye un patrimonio de la parroquia.

A pocos kilómetros y siguiendo por un camino antiguo, un tramo del Camino del Inca o Qhapaq Ñan, y en lo alto de una colina de unos 90 metros, se hallan las grutas de san Lucas, patrono de Llacao, y Ripichala, conocida como de la Inmaculada Concepción.

Son unos 110 peldaños y que llevan a la cúspide de la colina. El sitio es considerado también como un mirador, se aprecian los recintos rurales de Cuenca y parte de territorios de Azogues.

En las dos vistas sobresale el verdor de los campos con sembríos nativos y el ganado pastando junto a algunos yacimientos naturales de agua, los cerros ancestrales y míticos como Guagualzhumi, Cojitambo y Borma.

El acceso al sector se lo realiza por un camino de tierra que comunica con Déleg (provincia del Cañar), hasta llegar a un desvío donde la ronda es un poco más angosta y de piedra, que corresponde al Camino del Inca. Tiene aproximadamente unos 300 metros de longitud, inventariado por el Instituto Ecuatoriano de Patrimonio Cultural y rescatado con apoyo de los moradores de la parroquia y algunos colectivos ecológicos de la provincia, quienes han realizado mingas de limpieza para ponerlo a disposición de los turistas, señala Walter Quito, nativo del sector.

El viaje al lugar toma 20 minutos en vehículo particular y entre 30 y 35 en transporte público interparroquial (líneas 28 y 31).