Los emprendedores nacen desde las aulas del colegio
Los estudiantes combinan la teoría con la práctica a través de proyectos multidisciplinarios. Quieren ofertar en el mercado los productos elaborados
Con mandiles blancos sobre sus uniformes y las manos protegidas con guantes de látex, Fabricio Soriano, Joseph Tomalá y Andrés Barragán, estudiantes de segundo de bachillerato del colegio fiscal Aguirre Abad, combinan -en un pequeño recipiente- químicos, aromatizantes, celulosas y fijador hasta obtener un jabón líquido de gran utilidad en la limpieza personal.
A pocos metros, otros grupos de estudiantes mezclan varios elementos químicos para elaborar talco, mentol, ambientales y desinfectantes con diferentes olores y colores. La tarea la realizan, junto a sus docentes, en el laboratorio de Química de la institución como parte de un proyecto multidisciplinario.
El proyecto surgió en mayo de 2022 bajo la coordinación de César Navarrete, docente de Ciencias Naturales de la institución, quien motivó a los jóvenes a vincular la teoría con la práctica.
“La idea fue iniciar con la elaboración de productos químicos y asesorar a los estudiantes en temas de emprendimiento, ideas de negocios y marketing”, indica Navarrete, al explicar que los alumnos aportan con la materia prima, las sustancias y los envases para sus trabajos.
“Una de las premisas que siempre se planteó es que los colegiales puedan superar retos”, refiere María Elena Alfonzo, docente de Química y Biología.
Candy Acosta (14), quien forma parte de esta iniciativa, destaca la importancia de conocer más allá de la teoría. “Me parece que con este proyecto aprendimos a estar más adelantados en el conocimiento técnico”, agrega.
Para Bruce Sacoto (14), participar en esta iniciativa representa un reto como estudiantes. “Tenemos la oportunidad de demostrar lo que aprendimos y mostrar los productos. Ya los hemos comercializado a nuestras familias y conocidos; mis padres se sienten admirados de lo que logramos”, asegura.
Los estudiantes demuestran sus habilidades y destrezas. Las prácticas les permiten reforzar sus conocimientos y ligar sus proyectos hacia el emprendimiento.
Héctor Álvarez, rector de la institución, explica que en este proyecto están agrupadas varias asignaturas como: Ciencias Naturales, Emprendimiento, entre otras. “Se han elaborado productos bajo la marca interna ‘Aguerridos’, a través de los cuales los estudiantes han demostrado sus habilidades y destrezas”, enfatiza.
Los chicos han manifestado su intención de transformar en pequeños negocios los proyectos que ellos ejecutan en el colegio. Eso les generaría ingresos económicos.
En otros colegios, como el Francisco Campos Coello, los estudiantes también muestran sus emprendimientos: bancos, mesas y sillas elaborados con pedazos de palet (madera).
La iniciativa surgió cuando regresaron a la presencialidad y quisieron mejorar la vista del plantel. “Primero aprendieron a elaborar compost para reforestar las áreas verdes de la institución con variedades de plantas. Luego construyeron los muebles para crear un paisaje ecológico. Lo hicieron con fondos obtenidos a través de la autogestión (rifas, venta de comida, etc.)”, relata Magdalena Macías, docente de Biología.
Eddy Zavala, rector del plantel, dice estar satisfecho con el trabajo que ejecutan los chicos con el apoyo de sus profesores. “Ellos usan los conocimientos de varias asignaturas; trabajan en equipo el valor de la solidaridad y el respeto al medio ambiente”, asevera, al señalar que muchos alumnos barajan la idea de establecer este tipo de actividades en sus casas para generar dinero extra para solventar sus estudios superiores.
Al momento, los principales clientes de los productos son los propios estudiantes, maestros y padres. No obstante, los colegiales quieren que sus emprendimientos traspasen las aulas de clases y sean conocidos por la comunidad.
