Guayaquil

“Vivo en un infierno vial por la retahíla de obras sin rumbo”

La ciudadanía denuncia que, ante la falta de planificación por parte del Cabildo, los trabajos complican aún más los atascos. Alertan que el norte es intransitable 

trafico
Los embotellamientos generan ya hastío entre los conductores.Alex Lima

Advierten que no están locos y que tampoco están en contra de que la obra municipal que venían reclamando por años, se ejecute en sus barrios. Sin embargo critican que sin planificación alguna se hagan los trabajos de forma simultánea y, como lo ha venido publicando EXPRESO, incumpliendo incluso las fechas de entrega, generando un problema más grande: calles infernales con tráfico sin salida que asfixian al guayaquileño.

Tráfico. El transito en la vía perimetral en Guayaquil conjuga vehículos de carga, servicio público y particulares.

El Viaducto Sur va al archivo por desfavorecer al Estado

Leer más

Desde hace unos meses el Puerto Principal se reactivó en su totalidad y los atascos empezaron a ser el dolor de cabeza de quienes se movilizan por las calles aledañas a las intervenidas, pero con el regreso a clases esa molestia se ha convertido en hastío.

Que no soportan más conducir en Guayaquil, pero que es todavía más insufrible ver cómo la alcaldesa Cynthia Viteri intenta “engañar a sus votantes” reparando y atendiendo la lista interminable de los problemas que los aquejan, todo a ocho meses de las elecciones seccionales; es a juicio de Jenny Vinueza y Andrea Bustamante, ambas habitantes de la ciudadela Alborada, la muestra de que la primera edil cree que “el pueblo es tonto”.

“Planificación. Yo solo quiero saber dónde está la bendita planificación. Viteri ha tenido casi cuatro años para dedicarse a hacer obras, y justo cuando las críticas sobre su gestión abomban las redes y hacen eco en las calles, justo cuando muchos, como yo, juramos no volver a votar por ella así sea la única candidata... ahí sí, en retahíla vienen los proyectos. Que no digo que estén mal, porque es su obligación trabajar por esta ciudad que, ingenuamente, creyó en ella. Lo que digo es que la planificación es inexistente, no hay un norte, un rumbo. Estamos plagados de calles rotas y bloqueadas, llenas de tuberías y maquinarias; y mientras tanto, sentarse frente al volante es una sentencia de muerte. El mismo infierno”, se quejó Vinueza, quien baraja la idea de movilizarse en bicicleta pese a los riesgos que eso conlleva.

Hecho. Los conductores reclaman que haya escaso o nulo control de la ATM en las calles más conflictivas, como la Orellana, sobre todo pasadas las 18:00. 

Solo en el norte, el hecho de manejar se ha convertido en un calvario debido al cierre de dos carriles en la avenida Juan Tanca Marengo, donde se pretende levantar un paso elevado vehicular; de otros cuatro carriles en la Benjamín Carrión, en cuyo tramo que va desde la Francisco de Orellana a la Rodolfo Baquerizo Nazur se están haciendo trabajos de regeneración; y de otros dos en la ruta que conecta este último punto con la Isidro Ayora.

Ante la falta de un plan, nos hemos quedado atascados. Frente a un robo, ¿a dónde vamos? Si las calles están rotas y estamos en un cuello de botella.

Keila Manosalvas,
guayaquileña
Francisco de Orellana
La Francisco de Orellana. Así permanece esta arteria del norte, desde las 17:30, todos los días. El hecho agobia también a los peatonesAlex Lima
cabalgata

La Cabalgata Bicentenaria obliga a cerrar el tránsito en la avenida Malecón

Leer más

Un equipo de EXPRESO hizo un recorrido por la ciudad para ver qué tan complejo es el panorama, y más allá de atascarse también en el camino, constató cómo en la avenida Orellana, que atraviesa gran parte del norte de Guayaquil, se forma una hilera de carros que parece no avanzar desde la intersección con la calle Nahim Isaías, en la Kennedy, hasta la Presidente José Luis Tamayo, que se conecta con Guayacanes.

Son casi 6 kilómetros de atascos en los que además, según Daniel Amores, residente de Samanes, uno permanece en el carro aterrado pensando en que será la próxima víctima de un robo.

“Antes me movilizaba por la avenida principal de la Alborada, pero hasta hace unos días seguían haciendo los trabajos, que ojo, no se entregaron en el tiempo planteado. La Juan Tanca es otro relajo... La alcaldesa dirá que está trabajando, que se debe a su pueblo y que está respondiendo. Mi pregunta es: ¿por qué no lo hace de la mano de un plano? Estamos ahogados en el maldito tráfico. ¿Tanto le cuesta ver que si cierra una calle, luego otra y más adelante otra, nos limitamos a vivir entre las bocinas y luces del semáforo?”, argumentó.

Frente a esta situación, EXPRESO solicitó una entrevista al director municipal de Obras Públicas, para conocer con base en qué se están ejecutando los trabajos y qué soluciones inmediatas han planteado, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta.

Todo es un caos en la Alborada, Sauces, la Garzota. Hay obras municipales, pero todo se ha hecho de una forma desordenada. No hay un respiro en toda la zona.

Luis Chica,
arquitecto y habitante de la Alborada

En reportajes anteriores, en los que se ha solicitado la explicación sobre por qué hay obras paralizadas o demoradas, que incluso han causado serios daños en los habitantes (como fue el caso de Reinaldo Acosta, quien a sus 82 años trastabilló en una obra vial que lleva meses de atraso en el sector del Pedregal, en el Guasmo), la respuesta fue la misma: silencio e indiferencia.

La Isidro Ayora la gra (8038870)

La Isidro Ayora, la gran vía que debe replicarse en Guayaquil

Leer más

Pero en la avenida Raúl Clemente Huerta, en el tramo que va desde la avenida Abdón Calderón (sector El Pedregal) y Andec, el caos sigue vigente; lo que se refleja en el embotellamiento que se forma cada tarde y que hace que los buses invadan el carril y que las tricimotos se suban a las veredas, ya de por sí repletas de letreros y obstáculos.

“Esto no puede seguir así, es un atolladero. El mismo que se vive en el norte, en la zona céntrica y el mismo sur donde, además, no se ve a un solo agente de tránsito pasadas las 17:00. Por lo visto, ellos trabajan en horario de oficina, mientras afuera nos matamos”, lamentó el residente y taxista Emilio Valero; quien advierte que ese escenario “caótico” que se vivió hace unos meses en la avenida Pedro Menéndez Gilbert, cerca de Solca, cuando se estaba rehabilitando la red de alcantarillado, se replica ahora “en todas las decenas de calles donde sobresale una propaganda municipal”.

En ciudades inteligentes y con administraciones coherentes, no politiqueros; los trabajos en general se los realiza en la noche, donde el tránsito es evidentemente reducido y planifican para que se logre en el menor tiempo posible para no crear molestias.
Clarísima mi opinión.

Cristina Vinueza,
​guayaquileña
Benjamín Carrión
Benjamín Carrión. Aunque las vías están bloqueadas, los autos buscan la manera de acortar camino.Alex Lima

“Si ve el cartel, implica cierre de calles y meses de infierno. En Guayaquil, las autoridades, incluidas las de la ATM, son inservibles. Dos años estuvimos encerrados o saliendo a medias, y ahí no se les ocurrió planificar. A nadie se le ocurrió hacer nada y así, lo juro, prefiero quedarme sin obras antes que sentir este estrés y rabia cada vez que salgo a laborar...”. 

  • La ciudadanía opina en las redes:

PREGUNTA: Las obras municipales en Guayaquil, a decir de la ciudadanía, han colapsado el tráfico. ¿Qué está haciendo falta para evitarlo? a) planificación; b) socialización; c) más agentes de tránsito en las vías más conflictivas.

“Urge Pensar: terminar una obra antes de iniciar otra”

WhatsApp Image 2022-05-10 at 1.17.13 PM

Ciudadano: “Ojalá el nuevo alcalde de Guayaquil no vea el urbanismo como un adorno”

Leer más

Para el 84,3 % de los lectores que respondieron a la pregunta de EXPRESO, en Guayaquil resulta urgente que el Cabildo planifique qué tipo de obras hacer, basado en la realidad que vive la ciudad. “Si sabemos que es insegura, que nadie puede quedarse más de dos minutos en un semáforo porque te pueden robar, ¿cómo se les ocurre hacer obras por todos lados, si saben que eso nos atasca y nos pone en riesgo? Aquí urge planificar. Tener urbanistas y consultarles los temas, no tenerlos de adorno”, se quejó Rosa Delia Rendón, de Guayaquil.

Hardy von Campe, vía Twitter, opinó de forma similar al hacer hincapié en que resulta primordial que el Municipio “termine primero las obras antes de iniciar otras. Así, solo así, se reducirían los impedimentos en muchas vías”; al igual que los atascos, señaló José Villanueva, de la Garzota.

Para Marcelo Suárez, la planificación debe ser el tema número 1 a tener en consideración antes de elevar los procesos. “Ya en ejecución, como lo que nos está pasando, lo que único que queda es tener más agentes de tránsito”, indicó.