El Bombillo visitó el estadio Fernando Guerrero con la obligación de sumar tras caer de local ante 9 de Octubre. Olmedo, que no ha sumado victorias y no había anotado en lo que va del torneo, recibió a los azules y no fue un fácil anfitrión, que vendió cara la derrota en casa.

Aunque los eléctricos tenían mayor presión por buscar la victoria, Olmedo fue el que obtuvo protagonismo en los primeros minutos. Cerró circuitos de juego de los eléctricos y apelaron al pelotazo largo esperando algún error en la zaga azul.

Con una cancha compleja en la que la pelota circulaba con dificultad, Olmedo logró a los 15 minutos probar un tiro de media distancia que pasó saludando cerca y sería una advertencia. 

Los locales no iban a aflojar y a los tres minutos iban a romper con la estadística negativa de no marcar en el torneo. Error en la salida de Emelec, circuito de pases entre hombres de Olmedo en carriles interiores, pase filtrado a Jaime Ayoví, quien remató cruzado imposible para Pedro Ortiz y el marcador se abrió en Riobamba.

Pero, para fortuna de los eléctricos, no pasaron ni 10 minutos y encontraron equiparar las acciones. Centro desde la izquierda de Ángel Gracia, roza de testa Arroyo y Leguizamón llega como delantero para empujarla. El 1-1 dejaba respirar a los hermanos Rescalvo, que se abrazaron frenéticos tras el tanto.

Aunque el duelo se equiparó en el marcador y en el campo, las opciones no sobraban y había pocas emociones. En el 37, Romario Caicedo intentó un disparo desde fuera del área, pero pasó saludando el vertical derecho de José Gabriel Cevallos.

El primer tiempo se desvanecía con el 1-1, pero con muchos nervios en la parcialidad azul que no lograba inquietar a un Olmedo irreverente y con ganas de dañar cualquier intento de juego del visitante.

Ya en el complemento, los azules a falta de juego colectivo, iban a aprovechar la pelota parada. De nuevo, un tiro de esquina, a los 49 minutos, iba a terminar en festejo de Emelec. Doble contacto en el área, primero Sosa y luego recibió Barceló, quien controló con el muslo y de primera definió de derecha directo al gol.

Olmedo iba a recibir una carga para el segundo tiempo. León encimó a Barceló, y luego de recibir su segunda amarilla, el árbitro Cajas le mostró la roja. El local tenía el marcador y, ahora, el panorama en contra.

A partir de la expulsión, Emelec encontró el dominio del partido. Ya Olmedo lucía superado y todo estaba en control del visitante, que seguía dañando a través de la pelota parada, su recurso más valioso en este duelo.

Rescalvo quería seguir aprovechando el hombre de más y sacó a Zapata, de discreto partido, para ubicar a Bryan Sánchez por la banda zurda y colocar a Rojas como mediapunta. Además, dio ingreso a Alejandro Cabeza y Jefferson Caicedo. 

Emelec pudo aumentar el marcador a través de Rojas, pero el 10 del Bombillo falló una oportunidad a boca de jarro luego de una asistencia precisa de Barceló.

A cinco minutos del final, Emelec iba a hallar calma. Otra vez la pelota parada: Rodríguez tira al gol desde la derecha, Cevallos concede un rebote en el área chica y Sosa, quien debutaba con los azules en LigaPro, llegó solo para empujarla. El 1-3 dejaba respirar a Rescalvo y los suyos.

Pero el asunto no iba a quedar ahí. A dos minutos del final, García iba a dibujar la pintura del partido con un disparo de fuera que se coló en el ángulo de Ortiz. Inatajable.

Al final, el 2-3 sentenció la historia en Riobamba y terminó con una sequía de victorias de Emelec en esta cancha, en la que no ganaba desde el 2012. Los azules igualaron en puntos al líder, Barcelona, y esperan un resbalón de ellos el sábado ante Independiente del Valle.