Aunque en la actualidad son pocas las coincidencias de pensamiento entre el expresidente de Barcelona José Francisco Cevallos y el actual titular amarillo Carlos Alfaro Moreno, el gusto por el juego de Carlos Garcés, delantero de Delfín, es una de ellas.

Es que ambos, en su momento, han querido fichar al delantero manabita del conjunto cetáceo, pero sin éxito. Tal vez uno haya estado más cerca que el otro, aunque en ambas ocasiones el resultado fue el mismo: Garcés se quedó en Delfín.

El Beto junto a su directiva enfiló toda su artillería para que el atacante llegue a Barcelona desde principios de la presente temporada. Tanto así que los diálogos con el futbolista estaban bastante adelantados, no así con José Delgado, presidente de Delfín, que se mostró abierto a negociar, pero sin acuerdo final.

Es que hasta minutos antes de que Garcés tome un avión el 4 de enero junto al resto de la plantilla para realizar la pretemporada en Colombia, el titular elenco manabita mantenía una conversación con el atacante explicándole la imposibilidad de su traspaso a Barcelona.

Pese a un par de contactos más, tanto que Garcés tenía la maleta lista para un probable arreglo de última hora con los amarillos, este no se dio y el ariete se desempeña en el campeón ecuatoriano, pero ninguna puerta se ha cerrado, al contrario, sigue abierta y ahora con una condición nueva y favorable para los canarios: será jugador libre en diciembre de este año y puede comenzar a negociar con el club que pretenda sus servicios desde mediados de este mes.

"Desde el 30 de junio puedo negociar con cualquier club. Tengo ofertas del país y también de afuera. Decidiré con mi representante lo mejor para mí", explicó días atrás el ofensivo del campeón ecuatoriano cuyo contrato termina en diciembre del 2020, pero que desde ahora ya puede iniciar diálogos para analizar su futuro.

Ahora, en una época complicada para todos los equipos por la pandemia del coronavirus, el deseo de Barcelona se mantiene por fichar al jugador, pero siempre y cuando no afecte al presupuesto. ¿Será que Garcés tras tres años será futbolista del Ídolo? Solo el tiempo lo dirá, pero de que toreros y el manabita así lo desean, no hay duda.