
Autos eléctricos en Ecuador: cuánto cuesta tener uno y qué beneficios ofrece en 2025
El precio de un auto eléctrico en Ecuador oscila entre 14.000 y 40.000 dólares, según el modelo y la autonomía
En Ecuador, el auge de los autos eléctricos ya es una realidad. Según datos de la Agencia Nacional de Tránsito y del Servicio Nacional de Aduana, las importaciones de estos vehículos crecieron más del 500 % entre enero y junio de 2025, una cifra que refleja el creciente interés por alternativas sostenibles y económicas frente a los modelos tradicionales de combustión. Este fenómeno responde tanto a los beneficios fiscales implementados por el Estado como al aumento de la conciencia ambiental de los ciudadanos.
¿Cuáles son los atractivos de un auto eléctrico?
El incentivo más atractivo es la exoneración total del IVA, del Impuesto a los Consumos Especiales (ICE) y de los aranceles de importación para vehículos eléctricos nuevos. Esto significa que el costo final de un auto de este tipo puede ser considerablemente más bajo que el de un vehículo convencional de igual gama. Además, el Gobierno anunció que la matrícula anual para autos eléctricos podría fijarse en solo 10 dólares, medida que busca incentivar su adopción masiva. En algunos municipios, como Quito, también están exentos de las restricciones de circulación (“pico y placa”) y del pago de estacionamientos tarifados.
El precio de un auto eléctrico puede variar
El precio de un auto eléctrico en Ecuador varía según la marca y el modelo, pero los valores más comunes en el mercado oscilan entre $ 14.000 y $ 40.000. Por ejemplo, algunos modelos básicos disponibles en el país, como los compactos urbanos, rondan los $ 14.890, mientras que autos de mayor autonomía o de marcas reconocidas pueden superar los $ 35.000. En este último caso, la tarifa del ICE sigue siendo del 0 % si el precio no supera los 35 mil dólares, y aumenta gradualmente a partir de ese monto.
Importar un vehículo eléctrico al país sigue siendo un proceso formal que exige ciertos pasos. "Contar con un agente de aduana, tramitar la nacionalización, registrar el auto en la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) y cumplir con las certificaciones ambientales correspondientes. Aun cuando los impuestos son reducidos o inexistentes, se debe cubrir el valor del flete, el seguro y otros costos operativos", asegura Xavier Rincón, experto en ventas de vehículos. Sin embargo, los propietarios coinciden en que el ahorro posterior en combustible y mantenimiento compensa ampliamente la inversión inicial.
¿Cuál es el problema urbano?
A nivel urbano, el reto principal sigue siendo la infraestructura de carga. En Quito, Cuenca y Guayaquil se han instalado varios puntos de recarga rápida, sobre todo en centros comerciales, por lo tanto su número aún es limitado en zonas periféricas.