Joaquina Pesantez
Su mayor sueño es poder brindar su apoyo a los que necesitan.Steven Moncada

Joaquina Pesántez, una corona de gran corazón

Participar en el certamen de belleza de su querida Cuenca le abrió nuevos horizontes.

Su anhelo siempre fue participar en el certamen de belleza de su tierra natal, y así lo hizo. Y se llevó una grata sorpresa al saber que la corona le pertenecía y que venía no solo con destellos, sino con el peso suficiente para ayudar a los que más lo necesitaban.

Tras los pasos de Hannah Montana

Joaquina nació en Ecuador, pero durante su infancia pasó bastante tiempo en Nicaragua debido a los estudios de su padre. Mientras la mamá trabajaba y él se preparaba para su masterado, a sus hermanos y a ella los anotaban en un sinnúmero de actividades extracurriculares que fomentaron su amor por el arte, sobre todo por la música.

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El arte lo lleva en la sangre. Desde muy pequeña se distinguía por estar rodeada de instrumentos y melodías gracias a su papá y hermanos. Cada uno de ellos sabía entonar instrumentos, y aunque Joaquina no tanto, su voz la llevó a permanecer por años en coros como Vivace del colegio Alemán.

La música desarrolló un lazo inquebrantable con su familia, tiempo que ella cataloga como un microlenguaje del amor. Esta influencia además la hizo soñar con tener la vida de Hannah Montana, serie de Disney Channel que se basa en la doble vida de una adolescente que en el día es una estudiante promedio y en la noche es una cantante internacional, para poseer lo mejor del mundo de la fama y la cotidianidad.

Joaquina Pesantez
Quiere brindar apoyo desde su área de trabajo a fundaciones.steven moncada

De rockstar a comunicadora

Los años pasaron y ese anhelo de ser una celebridad se iba mermando, al igual que su sueño de participar en el certamen Reina de Cuenca, aunque siempre estuvo latente.

A medida que fue creciendo se dejó influenciar por el mundo de la comunicación, ya que su familia se desenvolvía en ese ámbito. Se inscribió en la universidad para estudiar Comunicación Social y Publicidad, especializándose en Marketing para poder ayudar en el negocio familiar. Después de un tiempo de estar dedicada al trabajo se le presentó la oportunidad de una vacante en el evento para elegir a la reina de Cuenca.

Más allá de los estereotipos

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“Yo creo mucho en las señales. Me dije que las cosas pasan siempre por algo, no me voy a apresurar. En mayo me gradué de la universidad y en junio abrieron la convocatoria del concurso. Desde el colegio, a mis amigas siempre les decía: ‘Yo voy a ser reina de Cuenca’”.

A pesar de que ser reina era su mayor afán, Joaquina no encajaba en los estereotipos de una soberana de la belleza. En su vestuario predominaba el color negro. “Recuerdo que durante la candidatura, mi mamá solo me dejaba utilizar trajes negros por tres días y los siguientes eran llenos de colores”, revela entre risas y una mirada llena de añoranzas.

Los cuidados de su apariencia no eran su prioridad. “Me asusté un montón, porque soy súper baja de estatura y nunca me he preocupado tanto por mis medidas corporales, ese tipo de cosas que usualmente a la gente le interesan de una reina de belleza”.

Una causa mayor

Pronto se dio cuenta de que este certamen no buscaba a la más hermosa, sino a una mujer con la audacia, responsabilidad y carisma necesarios para estar frente a la Fundación Reinas de Cuenca.

Ser parte de esta institución le permitió abrirse a nuevas perspectivas y propósitos. “Tener la oportunidad de servir a otras personas y de pensar en su bienestar antes que el mío propio, es mi mayor recompensa, así como dejar una huella importante en la fundación”.

Quiero seguir haciendo labor social desde mi propia área (el marketing). Apoyar a otras fundaciones, porque mientras más manos se unan, podemos generar impactos más grandes y positivos en la sociedad.

Joaquina Pesantez, reina de Cuenca 2022 - 2023

Sembrando apoyo

Una de las semillas que desea dejar plantada dentro de la fundación es hacer un programa de voluntariado. A criterio de Joaquina lo que más se necesita es no solo financiera sino también de manos para distribuir la gestión que realiza el grupo de la fundación.

Cuando concluya su reinado, aspira a seguir prestando su apoyo desinteresado a quienes lo necesiten.

Personal

  • Tiene 23 años.
  • El canto ha formado parte de su vida desde que tiene memoria.
  • Se graduó recientemente en Comunicación Social y Publicidad.