Vivamos con Dios en el corazon

Todo día es precioso, un instante puede serlo todo, porque lo que en realidad nos pertenece en nuestra existencia es lo vivido con plenitud. La mejor forma de disfrutar esta realidad es no permitir que la vida transcurra pasivamente, sino responder a ella con rapidez, siendo a la vez que haciendo. Nuestro tiempo pasa rápido para no volver y nos invade un sentimiento de culpa sobre los logros, oportunidades perdidas; esto demuestra que existe un momento para cada cosa, ya que el tiempo está de parte de quien sabe aprovecharlo. Hagamos que nuestro tiempo sea de calidad, vivamos intensamente aquí y ahora positivamente con Dios en el corazón.

Francisco Landucci Carballo