Patricia Ochoa, viuda del general asesinado en diciembre de 2010, pide responsabilidad y que se haga una investigación seria del caso.

La viuda de Gabela dice que el caso no avanza con celeridad

Patricia Ochoa, viuda del general asesinado en diciembre de 2010, asistió a una reunión en la Fiscalía junto a su abogado y un veedor ciudadano.

En diciembre, el asesinato del general Jorge Gabela, excomandante de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), cumplirá un año sin pistas de sus autores intelectuales y materiales. “Hasta ahora no hay ningún detenido, solo los sentenciados por fraude procesal no apegado a la verdad y a la justicia”, señaló Patricia Ochoa, viuda del general asesinado en diciembre de 2010, quien junto con su abogado Ramiro Román y el veedor ciudadano Mario Pazmiño, mantuvieron este lunes 1 de julio, antes de las 09:00, una reunión en la Fiscalía General del Estado.

Ochoa pide responsabilidad y que se haga una investigación seria del caso “que salga solo la verdad y justicia y que cuando llegue el momento y salgan los verdaderos culpables, autores intelectuales y materiales del asesinato, el Estado ecuatoriano pida las debidas disculpas públicas a la familia Gabela”.

De los temas tratados no quiso hacer revelaciones porque el caso está en investigación previa y es una fase reservada. Destacó que hay ciertas indagaciones; pero no con la celeridad que la familia quisiera. “A la familia que lleva nueve años de lucha no se puede seguir pidiendo paciencia: ya se nos agotó la paciencia”, manifestó.

Menos cuando el presidente Lenín Moreno públicamente dice que se levanta la reserva y confidencialidad del caso Gabela, insistió. “Nos chocamos la familia que cuando se pide información a las instituciones y no nos pueden entregar porque es confidencial, reservada y secreto de Estado”, agregó.

Cuestionó a la secretaria jurídica Johana Pesántez, que “como parte de ese comité interinstitucional, que fue la que puso la confidencialidad, debería de asesorarle al presidente que tiene que justificar jurídicamente levantar la reserva y la confidencialidad de toda la documentación del caso Gabela”.

Mencionó esa como la mayor barrera que afronta la familia y la veeduría.

Al momento —advirtió— la Fiscalía centra su atención en el asesinato y no en la pérdida del tercer producto elaborado por el perito argentino Roberto Meza Niella, contratado en el gobierno del expresidente Rafael Correa para determinar si las causas del crimen de Gabela estuvieron relacionadas con sus denuncias o por la delincuencia común.

Ochoa reiteró que el perito dejó su trabajo con nombres de los autores intelectuales y que él públicamente debería entregar esos nombres para que se judicialice ya que no hay reserva. Reconoció que a la Fiscalía sí ha llegado información del tema, pero esa documentación no se ha hecho llegar a la familia ni a la veeduría.

Entre las entidades que no entregan información señaló al Ministerio de Defensa y a Gestión Documental de la Presidencia. Ochoa, Román y Pazmiño también tuvieron una reunión en el Consejo de Participación Ciudadana.