Un tranvía que moverá votos

Un tranvia que movera votos

Todos los dirigentes políticos consultados concuerdan que la solución del tranvía es un tema fijo de la próxima campaña y de los planes de gobierno de todos los candidatos a la Alcaldía de Cuenca.

Fundamental, esencial y protagónico. Son algunos de los adjetivos utilizados por dirigentes políticos de Cuenca para referirse a la importancia que tendrá, a criterio de ellos, el tranvía de la ciudad en las elecciones seccionales de 2019. Estos calificativos vienen acompañados de otros no tan positivos como “traumático”, “álgido” y hasta “un dolor de cabeza”. Es que la obra que prometía facilitar la movilidad de más de medio millón de cuencanos (según datos del censo de 2010) aún no termina.

Todos los dirigentes políticos consultados concuerdan que la solución del tranvía es un tema fijo de la próxima campaña y de los planes de gobierno de todos los candidatos a la Alcaldía de Cuenca. Sebastián Cevallos, subdirector nacional del movimiento Unidad Popular y habitante de la capital azuaya, considera que la culminación de la obra es una necesidad de la ciudad, no solo por su objetivo principal, sino por los problemas colaterales que acarrea, como el impacto negativo en locales comerciales aledaños. Con él concuerda Jaime Astudillo, dirigente del movimiento local Contigo. “Hay demasiados sectores que han sido lesionados, pero el reto es hacer que el tranvía sea útil”.

Y para esto también llegan propuestas. Iván Chacón, director provincial de SUMA en Azuay, es de los que duda que el sistema de transporte realmente solucione la necesidad de movilidad, por ello cree que hay que terminarlo y darle un enfoque turístico. Como estas, hay otras iniciativas que las organizaciones políticas desde ya recogen para plasmarlas en un plan de gobierno que capte el mayor número de votos que los lleve a la Alcaldía local.

El plan es una parte del rompecabezas, otra ficha es el candidato y en Cuenca se barajan nombres de posibles contendores como el del marchista olímpico, Jefferson Pérez; el actual prefecto del Azuay, Paúl Carrasco; y la probable postulación a la reelección del actual alcalde Marcelo Cabrera (ver gráfico).

No obstante, hay agrupaciones que en lugar de preocuparse, de momento, en los rostros prefieren armar primero un proyecto político como el caso del movimiento Contigo. Trabaja en un proyecto de ciudad que tendrá como eje la recuperación de Cuenca como ciudad de la cultura y la educación. Además, en una propuesta de impulsar un movimiento ciudadano de alcance provincial que tenga como base a la organización política.

Astudillo reconoce que es uno de los nombres propuestos por su organización, pero condiciona su candidatura a la ejecución de ambos ejes. “Si no hay las condiciones previas, no valdría la pena participar en un proceso electoral”, replica el exrector de la Universidad de Cuenca.

El movimiento Participa, liderado por el prefecto Carrasco, también construye un plan dando voz a los ciudadanos. Geovanny Palacios, presidente de la agrupación local, estima que en enero próximo lanzará una campaña de recolección de propuestas ciudadanas para que desde la misma ciudadanía en elecciones abiertas decidan el plan que quisieran aplicar en la ciudad.

Paralelamente, el movimiento Unidad Popular conversa con otras organizaciones políticas y sociales para aglutinar a la mayor cantidad de frente y crear uno solo con miras a captar la prefectura, las alcaldías, las concejalías y las juntas parroquiales azuayas. “Ese frente, del centro a la izquierda, es para plantearle al Azuay un repensamiento en términos de producción, de como tener una educación de mejor calidad, no es posible que una provincia que se acerca al millón de habitantes tenga una sola universidad”, reflexiona el dirigente.

El movimiento CREO, al igual que SUMA, buscan cada uno por su lado a los cuadros que los representarán en los próximos comicios. José Jara, presidente en Azuay de la organización liderada por Guillermo Lasso, prefiere no adelantar nombres, aunque habla de candidatos propios. Una eventual alianza, dice, dependerá de si suma o resta. “Las alianzas son buenas y malas dependiendo de la posición que se las maneja. Si suman, bienvenidas; si restan, tendremos que analizarlas”.

Mientras que Chacón espera a finales de este año contar con una lista de 150 nombres de eventuales precandidatos que pueda presentar entre enero y febrero próximos.

Una gestión negativa para el 51.24 % de los cuencanos

Los números del alcalde de Cuenca, Marcelo Cabrera, no llegan al 60 % de calificación buena. Una medición de la encuestadora Perfiles de Opinión refleja que la aceptación a la gestión del primer edil cuencano fluctuó en un margen del 45 al 59 % desde octubre de 2016 hasta septiembre de 2017. Sus puntos más altos fueron en febrero (59 %) y abril de 2017 (58 %). Mientras que sus picos más bajos registrados están en octubre de 2016 (47 %) y septiembre de 2017 (48,76 %).

Esta última medición realizada por la encuestadora el mes pasado registra un calificación de buena a la gestión de Cabrera que llega al 43,68 % y de muy buena de 5,08 %, que juntas dan 48,76 %. Es el 40,88 % de los cuencanos que piensa que su gestión es mala y el 10,36 % que es muy mala.

La medición recoge una muestra base de 310 entrevistados en Cuenca con un margen de error de +/- 5,6 %.