La tierra, de azul y rojo

La tierra, de azul y rojo

La Superfinal de Libertadores se propaga mundialmente y junta récords con excesos. El primer round es hoy en la Bombonera.

Desde el desmesurado valor por un boleto, pasando por el inaudito caso de un recién nacido bautizado con el nombre de uno de estos clubes, hasta un alcance televisivo nunca antes visto para una final de Copa Libertadores, marcan la magnitud y los excesos que se viven en este histórico Boca Juniors y River Plate, que abren hoy el telón en la Bombonera.

Para el icónico roquero argentino Andrés Calamaro, esta final “es tan importante como el hundimiento del Titanic” y para el experimentado entrenador Marcelo Bielsa, “el partido de los sueños”. Y aunque pareciera exagerado, al encender los televisores ni siquiera la semana de Champions League o las noticias de la crisis económica que atraviesa el país albiceleste opacan lo que para muchos es la “final más importante de la historia del fútbol”.

Un choque que está en todos los rincones futboleros del planeta y ha generado eco entre las voces autorizadas del fútbol mundial. El DT del FC Barcelona, Ernesto Valverde, lo asimila como “otro partido del siglo”, tan importante “como un Barça vs. Real Madrid de final de Champions”. José Mourinho, estratega del Manchester United, aseguró que es una definición “que no me quiero perder”, y el gaucho Diego ‘Cholo’ Simeone, asegura que será “fantástica”, pero que “el gran ganador es el fútbol argentino”.

Y como ellos, futbolistas de élite han declarado que es un partido que hasta les gustaría jugar. Javi Martínez, del Bayern Munich, explicó que le atrae la idea de “viajar para ver el partido de vuelta, será una fiesta”; otro como Ander Herrera, del United, aseguró que “sería interesante jugar una final así”.

Es tal la dimensión de este enfrentamiento a nivel mundial que es la primera vez que se acreditan tantos periodistas para un partido en estas instancias. El máximo que había recibido una final de Copa Libertadores eran 790, pero solo para el duelo de hoy en la Bombonera habrán 1.050, una cifra récord. Para la vuelta se espera que esta cifra se aumente.

Pero también se han requerido demandas que superan la razón. Argentina es la nación de mayor inseguridad en los estadios de Sudamérica, pero su presidente, Mauricio Macri, pretendía que exista hinchada visitante en este duelo -hace cinco años no se permite en este país, moción a la que se opusieron los presidentes de cada club y al final no procedió.

Una Superfinal que adhiere excesos, pasiones, peligros e historia. Luego de este partido, nada será igual entre ambos.