AV1 permite ver y escuchar lo que sucede en el aula y otros espacios, además de emitir la voz del usuario.

La telepresencia, un alivio para la soledad

Robots inteligentes ayudan a grandes y pequeños a combatir el aislamiento. Hay opciones como AV1, ElliQ y Ohmnilabs, pero no son económicas.

Existen niños y personas mayores que por diversos motivos, muchas veces ajenos a su voluntad, deben dejar asistir a clases o al trabajo, e incluso alejarse de sus familiares y amigos... Esta distancia desencadena aislamiento y soledad, pesos que han empezado a aliviarse con telepresencia.

Zoe Johnson, de 16 años, no ha ido a la escuela desde que tenía 12 años, porque le detectaron encefalomielitis miálgica (ME), también conocida como Síndrome de Fatiga Crónica, una enfermedad debilitante que afecta los sistemas nervioso e inmunológico. Sin embargo, este diagnóstico no le impidió continuar sus estudios. ¿Cómo? Con un tutor en línea.

Pero con los años, sus amistades en el mundo real desaparecieron, porque Zoe no podía verlos. Aquí entra la tecnología y lo cambia todo. La joven volvió a tomar clases junto a sus compañeros con un robot de telepresencia llamado AV1.

El robot, pequeño y muy simpático, hecho por la start-up No Isolation, con sede en Oslo, se sienta en el aula y transmite en vivo, vídeo y audio, a la tableta o teléfono inteligente de Zoe en casa. Ella puede hablar a través del robot y tomar parte en las lecciones, así como controlar dónde AV1 está mirando.

Es más, si quiere interactuar en clases también lo puede hacer. Si necesita hacer una pregunta, la cabeza del robot “parpadea” para alertar al maestro. Y cuando está demasiado cansada o enferma como para participar, puede volver azul la cabeza de AV1 como señal.

La idea de crear este robot la tuvo Karen Dolva (27), cofundadora noruega de No Isolation, quien luego de escuchar a niños enfermos que debían permanecer aislados descubrió que los teléfonos inteligentes y las apps de mensajería no eran suficientes para aliviar sus sentimientos de soledad.

En 1960, el 1,8 % de los niños en Estados Unidos tenían una condición de salud lo suficientemente grave como para interferir con sus actividades diarias habituales. En 2010, era más del 8 %, según un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association. Así que los expertos le dan larga vida a los robots de telepresencia, con ello a compañías como con No Isolation y otras firmas como Ohmnilabs, Giraff Technologies, Double Robotics y Vecna.

El robot móvil de Ohmnilabs, le permite a los usuarios sentirse presentes a reuniones laborales o familiares a las que no pueden asistir. Mientras que ElliQ de Intuition Robotics es un robot inteligente y estimulante para adultos, que sugiere planes para cuando sus usuarios permanecen mucho tiempo inactivos o viendo TV.

Lian Jye Su, analista de mercado de robots en ABI Research, cree que esta área crecerá de $ 164 millones a $ 237 millones para 2023. Y es que estas máquinas son muy útiles pero nada baratas. Un AV1 cuesta alrededor de $ 2.900 o $ 215 al mes en alquiler.