Las fallas. Como resultado de las inconsistencias detectadas por Contraloría hubo retrasos y demoras. El informe preliminar no detalla afectación económica.

Siete escuelas del milenio, ‘a supletorios’

Las fallas. Como resultado de las inconsistencias detectadas por Contraloría hubo retrasos y demoras. El informe preliminar no detalla afectación económica.

Otra obra emblemática del correísmo que se suma a la lista de observaciones y críticas. Las escuelas del milenio no solo tienen problemas para alcanzar los resultados académicos ofrecidos, también hay irregularidades en siete obras que se construyeron en Esmeraldas, Los Ríos, Bolívar, Manabí y Guayas.

Lo dice la Contraloría General del Estado. Un informe de la entidad muestra, por ejemplo, que las autoridades descuidaron el proceso de contratación de los constructores. No se cumplieron plazos, hubo cobros por fuera del límite y hasta compras inadecuadas.

Entre mayo de 2013 y el mismo mes de 2017, durante el último período de Rafael Correa como presidente de la República, se detectó, entre otras irregularidades, que el Servicio de Contratación de Obras Públicas (Secob) no verificó que el contratista tenga el terreno para la construcción de la escuela del milenio de Baba. La falencia provocó demoras en la entrega programada.

En total, las obras examinadas suman 10 millones de dólares. Un monto bajo si se considera que, durante el gobierno de Correa y hasta la fecha, se han invertido 494 millones de dólares más IVA para la construcción de 97 escuelas del milenio.

El documento publicado esta semana evidencia que las adjudicaciones de obras se hicieron a oferentes que no cumplían los requisitos mínimos.

La informalidad, característica de varios procesos en la década anterior, también tuvo un espacio en la entrega de la escuela de Malimpia, en Quinindé (Esmeraldas). No se firmó un acta de recepción por parte del Ministerio de Educación.

Augusto Espinosa, exministro de Educación, dijo a EXPRESO que constató varias inconsistencias cuando el servicio de contratación entregaba las escuelas al Ministerio. Esas fallas, señaló, eran notificadas para que se reparen antes de recibir la obra con conformidad. No dio detalles porque, según explicó, no tiene información del último examen de la Contraloría General.

Lo que sí dijo es que la cartera de Estado que dirigió no estaba a cargo de la construcción ni de ningún aspecto técnico de las obras.

El actual ministro, Fander Falconí, adelantó que trabaja en un nuevo modelo de infraestructura educativa. De todas formas, dijo, se concluyen las obras iniciadas en la administración anterior.

Fánder Falconí: “No hay que enojarse cuando se evalúa”

El ministro de Educación, Fander Falconí, repasa los aciertos y desaciertos de la política de escuelas del milenio.

- ¿Cuál es la evaluación a las escuelas del milenio?

- Realizamos un estudio de evaluación de impacto riguroso de las unidades del milenio y se obtuvo un impacto

positivo en 2016 equivalente a 45 puntos en logros de Matemáticas. No se encontró impacto en Lenguaje ni en matrícula. ¿Cuáles son las lecciones importantes del estudio? Primero, no hay que eliminar las unidades del milenio, sino trabajar para que mejoren sus capacidades pedagógicas. Segundo, no hay que “enojarse” cuando se evalúan programas sociales; al contrario, deben servir para mejorar la calidad de la política pública.

- ¿Las construcciones tomaron en cuenta la geografía y clima del lugar?

- Más bien obedecieron a estándares planificados a nivel nacional, tomando en cuenta costos de ejecución y costos de mantenimiento. Eso vamos a cambiar.

- ¿Se construirán escuelas tomando en cuenta la zona en lugar de un modelo estándar?

- Esto debería ser obvio. Todas las unidades se construirán con los estándares de la Nueva Escuela con infraestructura sustentable en términos ambientales, flexible,

innovadora, con identidad cultural, espacios naturales, modelo pedagógico constructivista, acorde al territorio y con características propias. No hay un único modelo a seguir.

- ¿Se reducirá el gasto?

- El gasto será optimizado en función del modelo pedagógico y constructivo de la Nueva Escuela. Tenemos el deber de ser muy eficientes en la inversión pública, es decir alcanzar objetivos al menor costo posible.

- ¿Se podía gastar menos en el gobierno anterior?

- No acostumbro a elucubrar, peor a crecer a costa de criticar. La característica de contraste que ha tenido la presidencia de Lenín Moreno es hablar menos y actuar más. Con obras claras estamos contestando esa pregunta.

Sierra

La unidad educativa del milenio Echandía, en Bolívar, tuvo problemas en la contratación de sus constructores.

Costa

En la Costa se analizaron las escuelas Malimpia, Baba, Tarqui Pájaro Azul, Tarqui, La Siberia (unidad educativa menor) y Sucre Mieles.