La directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Ecuatoriano Americana de Guayaquil (Amcham) indicó a EXPRESO el trabajo que viene haciendo el gremio que tiene 360 socios, de los cuales un 60 % son pymes de servicio, un 60 % participan en comercio exterior

Reyes: “La exportacion no debe avanzar sola como caballo de guerra”

La Cámara de Comercio Ecuatoriano Americana de Guayaquil (Amcham) es una pieza clave en la estrategia para que Ecuador logre un acuerdo comercial con EE. UU.. Viene trabajando junto al Gobierno esa meta.

La Cámara creó un comité de negociaciones y reactivación del Consejo de Inversiones y Comercio, porque es este espacio el que abrirá la puerta para el acuerdo comercial con EE. UU., dijo a Diario EXPRESO María Antonieta Reyes, directora ejecutiva de Amcham.

- La Cámara cumple 38 años, ¿cuál es el trabajo que se viene haciendo?

- El fin es promover las relaciones bilaterales con EE. UU. En el último año y medio el Gobierno de Ecuador dio un giro en materia de apertura comercial y a Amcham vio una gran oportunidad de replantearse la representatividad y liderazgo en la relación con EE. UU. Ahora estamos empujando, como sector privado, la normalización de las relaciones con EE. UU., como dijo el embajador Carrión, con quien estuvimos hace pocas semanas en Washington.

- ¿Cuál es el primer paso antes de llegar a un acuerdo comercial con EE. UU.?

- Es reactivar el Consejo de Inversiones y Comercio (TIC por sus siglas en inglés), es un mecanismo bilateral que tuvo su última reunión en 2009. Es una mesa donde las dos naciones ponen temáticas que les preocupan. Amcham está trabajando junto al ministro Pablo Campana y al embajador de EE. UU. para reactivar esta mesa. En los próximos días habrá una visita muy importante, de una funcionaria del Consejo de Comercio de Estados Unidos y será uno de los elementos fundamentales para que continuemos en este proceso de reactivar el TIC.

- ¿En la coyuntura, cuánto pesa el nombre Assange?

- Assange es un tema que en este momento no debería afectar la reactivación del TIC. Se tendrá que abordar y resolver en algún momento.

- ¿Mientras esto camina, hay empresas de EE. UU. que han llegado o están por llegar para invertir en Ecuador?

- Hay un par de empresas de ingeniería que ya han entrado, una de ellas está haciendo un templo. Hay dos aerolíneas, Cargill, etc.; entonces hay interés y la Ley de Fomento es trascendental.

- ¿Hay información de empresas que estén por llegar en 2019?

- La información la debe tener el Ministerio, pero la Cámara organiza un conversatorio sobre este tema; sin embargo antes debe estar listo el reglamento. Además el Ministerio de Producción, Comercio Exterior e Inversiones va a poner una ventanilla para allí realizar todos los trámites, para invertir. Se busca mejorar en el ranking del Doing Business. Entonces hay algunas empresas en fila para entrar, pero todas esperan el reglamento de la Ley de Fomento. Se espera que exista seguridad y estabilidad jurídica.

- Hay mucho trabajo por hacer, la balanza comercial no petrolera aumentó su déficit en 59 %.

- Se requiere una promoción constante para que las exportaciones ganen mercado y esto implica informar claramente nuestra diferencia, el valor agregado. Es buena la marca que se ha sacado para el camarón y otros productos, el banano la va a lanzar en esta semana en su foro.

- ¿Cómo se explica la cifra indicada?

- Hay cuatro pilares fundamentales: importaciones, exportaciones, inversiones; en medio está la negociación y detrás un aparato productivo y una función pública que debe fluir correctamente. Hay que recordar que los números de hoy son el reflejo de las acciones de los últimos años. Ese cierre (a través de sobretasas) que tuvo Ecuador, que quizá era necesario desde el punto de vista macroeconómico, limitó importaciones y el crecimiento de la competitividad. Entonces lo que pasó es que dos pilares se debilitaron: importaciones e inversiones; y las exportaciones quedaron como caballito de guerra avanzando solas y eso no puede ser así. De allí la importancia del giro que se ha dado ahora y la razón de que el sector privado, Amcham y el sector público empujen un acuerdo con EE. UU.