Residir cerca de parques y vegetacion protege la salud mental
El contacto con la naturaleza lo mantendrá alejado de patologías como la depresión, ansiedad y esquizofrenia.
Vivir en zonas ruidosas es un detonante que dispara no solo el estrés sino que también aumenta el riesgo de sufrir de enfermedades mentales. Mientras que vivir en un vecindario con gran densidad de zonas verdes, podría ayudar a prevenirlas, señala una investigación elaborada por investigadores del Instituto Tecnológico de Karlsruhe (Alemania) y publicada en la revista científica ‘Nature Neuroscience’.
Mientras las personas vivan rodeadas de más árboles, arbustos y otras vegetaciones, mucho mejor para su bienestar, principalmente porque las mantendrá alejadas de patologías graves como la depresión, esquizofrenia y trastornos de ansiedad.
El estudio, en el que participaron ciudadanos entre 18 y 28 años, determinó que quienes vivían en urbes con mucha vegetación tenían una mejor salud mental. Mientras que quienes no gozaban de esta suerte, demostraron una actividad reducida en la corteza prefrontal dorsolateral, haciéndolos sensibles a emociones negativas y experiencias ambientales estresantes.
Otros trabajos como el de Journal of the American Heart Association, también han demostrado que vivir cerca de parques y jardines, es un factor de protección de enfermedades cardiovascular y cerebrovascular, como infartos o ictus.
Ya lo sabe, estar en contacto con la naturaleza, ya sea caminando o trotando por el parque es la mejor medicina para mantener en buen funcionamiento sus funciones cognitivas, tanto para niños, adultos y ancianos.
“Si se distribuye uniformemente las áreas verdes en la ciudad podrían ser un gran potencial para prevenir enfermedades psíquicas”, dijo Andreas Meyer-Lindenberg, responsable de la investigación a El Espectador.