Las pruebas en el camino

L a paciencia es el hábito de resistir con serenidad una dificultad. Es una prueba que Dios pone en el camino a las personas para ver qué tanto aguante tienen sin quejas, ante una situación dolorosa. En el paciente se aprecia la paz y serenidad del aguante. Es una prueba de resistencia, pues hace falta mucha firmeza para aguantar a una persona enferma, más aún si son sus padres o madres, con cualquier tipo de enfermedad que necesitan de nosotros sus hijos, a quienes uno ama tanto. “No hay más que un modo para ser felices: vivir para los demás”. Hemos venido a este mundo como hermanos, caminemos, pues, dándonos la mano y no uno delante de otro.

Javier Valarezo Serrano