La comunicación del gobierno del presidente Lenín Moreno no fue la única afectada durante la movilización indígena. 131 periodistas fueron agredidos en las marchas y enfrentamientos con las autoridades.

La protesta evidencio los ‘vacios’ del Estado

El trabajo de comunicación gubernamental enfrentó problemas. Hubo cinco ‘fake news’ cada 60 minutos.

El trabajo de todos está en la mira. El presidente Lenín Moreno está evaluando la función de sus ministros, secretarios, directores y otras autoridades tras el paro nacional de once días que acorraló su gestión y puso en riesgo la estabilidad política nacional.

Extraoficialmente se conoce, por ejemplo, que hay un análisis profundo en las áreas de Bienestar Económico y Social por la falta de conexión entre el Ejecutivo y los sectores vulnerables de la población indígena.

Otro sector en análisis es el de Comunicación. Durante las manifestaciones, las herramientas para difundir noticias e informes oficiales fueron ampliamente superadas por publicaciones falsas y datos inexactos que plagaron las redes sociales.

Según datos oficiales, en los días de mayor conflictividad en el país se crearon hasta cinco ‘fake news’ por hora. Un ritmo que la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia de la República no pudo contrarrestar.

Las limitaciones del ente público se evidenciaron en todos los frentes. Económicamente, a decir de sus representantes, la secretaría contaba con menos de 10.000 dólares para combatir los ataques permanentes en redes sociales y plataformas digitales.

Para 2020, se harán ajustes presupuestarios que traten de fortalecer ese campo de comunicación gubernamental. Aún no se definen las cifras, pero se harán modificaciones que serán palpables en la proforma del Presupuesto General del Estado del próximo año.

Luego de dos meses en el cargo, el titular de esa cartera de Estado, Gabriel Arroba, reconoce que hay necesidades y temas mejorables. A sus ojos, sin embargo, las cadenas nacionales cortas y constantes -que mostraban imágenes de flores y paisajes ecuatorianos- fueron una estrategia positiva durante los días de paralización. En redes sociales, esa difusión fue criticada por la falta de información sobre la situación del paro y sus consecuencias.

Claro que, asegura de paso, los ataques y la campaña de desinformación que se desplegó, durante el levantamiento indígena que terminó con actos de vandalismo, no llegó de manera inocente.

Arroba señala que los mensajes falsos fueron focalizados y segmentados de manera estratégica. Cuando se quería ‘calentar’ los ánimos de una comunidad o pueblo de la Sierra centro se difundían alertas en Facebook y Twitter que aseguraban que los dirigentes de ese sector fueron asesinados en Quito. Eso provocaba que los pobladores incendien llantas y causen daños en las vías y carreteras.

El resultado fueron 108 vehículos de la Policía Nacional destruidos, 42 ambulancias quemadas, 26 Unidades de Policía Comunitaria afectadas, dos carros del Ministerio de Agricultura quemados y una Unidad de Vigilancia Comunitaria incinerada.

¿Quién orquestó los ataques digitales? Aunque hay una investigación en curso, existen indicios que despiertan suspicacias. Las etiquetas Fuera Lenín y Paro Nacional EC fueron tendencia número uno en Venezuela y Rusia, países afines al gobierno del expresidente Rafael Correa.

Hay otra sospecha. Según Comunicación, en el momento en que Gabriela Rivadeneira y otros asambleístas correístas entraron a la Embajada de México para refugiarse, se desplomaron los ataques digitales.

Arroba y las autoridades del gobierno de Moreno no quieren adelantarse a señalar responsables, pero adelantaron que presentarán las denuncias necesarias para evitar que campañas de noticias falsas vuelvan a engañar a los ecuatorianos.

El primer mandatario incluso retomó el tema el viernes pasado. En la cadena en la que informó sobre los impactos de la nueva reforma tributaria, el presidente advirtió que hay noticias malintencionadas y mentirosas que confunden.

Tras el paro nacional de once días, e incluso durante las movilizaciones, las autoridades ministeriales coparon los medios de comunicación para informar sobre sus actividades y desmentir los comunicados engañosos. Ahora, con la reforma en la Asamblea Nacional, se espera un tratamiento oficial similar. Mensajes constantes en medios de comunicación y en redes sociales.

Alerta por medios afines al correísmo

Otra de las preocupaciones de Comunicación durante el paro y levantamiento indígena de once días fue que medios de comunicación ‘alternativos’ y afines al expresidente Rafael Correa tuvieron otro tipo de tratamiento en las movilizaciones indígenas. La retención y los ataques violentos se focalizaron en la prensa tradicional.