El Ministerio de Economía acordó restituir los valores para las universidades sin recortes. Es decir, se mantendrán los valores de 2018.

El presupuesto despierta malestar dentro del Gobierno

Dos carteras de Estado hicieron observaciones. La presión externa provocó que las autoridades den marcha atrás en el recorte a universidades.

Es la manzana de la discordia. La proforma presupuestaria de 2019, que espera su debate en la Asamblea Nacional, no convenció a sectores sociales, grupos políticos e incluso los integrantes del propio Gobierno. La presión por todos los bandos provocó que la administración dé su primer paso atrás para corregir la reducción del gasto en las universidades.

Durante la madrugada de ayer, el ministro de Economía, Richard Martínez, se reunió con rectores universitarios y decidió que el recorte no continuaría en los planes estatales.

Los estudiantes y docentes no fueron los únicos inconformes con la proforma anual. El ministro de Educación, Fander Falconí, criticó la reducción de gastos en sectores fundamentales para el país: salud y educación. Él elevó su postura hasta la presidenta de la Asamblea, Elizabeth Cabezas. El lunes se reunió con ella para abordar, además, las reformas a la Ley de Educación Intercultural y la protección de derechos.

Sobre la proforma, Falconí dijo que dista de lo que necesita su ministerio. “Si uno compara el presupuesto que envió el Ministerio de Educación con el del Ministerio de Finanzas a la Asamblea hay una reducción importante. Cerca de 198 millones de dólares en gasto corriente y cerca de 220 millones en inversión”.

EXPRESO consultó a Falconí sobre la vía para presentar sus observaciones. Siendo parte del Gabinete de Lenín Moreno, llama la atención que haya hecho cuestionamientos en la Asamblea y no durante la construcción de la proforma. Fander Falconí respondió que en su momento recurrió hasta el primer mandatario.

“Le comuniqué primero al presidente, como me corresponde. Con la presidenta de la Asamblea hemos conversado sobre los criterios que deben regir el presupuesto para educación”, puntualizó.

El presupuesto para el Ministerio de Educación, que incluye gastos en salarios de maestros, nuevas escuelas y otros proyectos educativos, para 2019 es de 3.602 millones de dólares (según la proforma). En la proforma de 2018, en cambio, se fijaron 3.851 millones de dólares. Un recorte entre proformas de 249 millones.

La cartera de Salud, otra preocupación que mencionó el ministro, tuvo un presupuesto inicial (en la proforma) de 3.536 millones de dólares durante el año pasado. Este año, en cambio, contará con $ 3.062 millones.

El Gobierno argumenta, sin embargo, que no hay reducciones drásticas porque compara la proforma de 2019 con lo codificado hasta septiembre de este año. Es decir, el Ministerio de Finanzas no compara los montos entre proformas sino que usa montos de nueve meses para medir lo estimado para todo el próximo año.

Esas valoraciones también llamaron la atención del Ministerio de Transporte y Obras Públicas. Desde ahí se hizo una crítica al recorte presupuestario, que fue desestimada por el secretario general de la Presidencia, Eduardo Jurado. Él dijo que “fue un error del asesor del ministro el tocar este tema. El presupuesto lo manejamos a nivel del frente económico. Eso implica hacer ciertos recortes y siempre hay alguien que pueda sentirse afectado, pero el discurso del Gobierno es uno solo”.

Datos

Universidades

El Ministerio de Economía acordó restituir los valores para las universidades sin recortes. Es decir, se mantendrán los valores de 2018.

Acuerdos

Los rectores se comprometieron a “reconocer la delicada y compleja situación fiscal que el país afronta, y comprometer a las universidades y escuelas politécnicas para implementar medidas de austeridad”.