El tiempo es oro, también en política. Lejos de hacer una pausa tras las elecciones de febrero y abril de este año, los partidos y movimientos ya delinean las estrategias y analizan perfiles para las seccionales de febrero de 2019.

La coyuntura de la transición presidencial, sumada a las pugnas internas en Alianza PAIS, ha hecho que la atención nacional se centre en lo que pasa en el entorno oficialista. Pero en las provincias la dinámica es otra. Se están reestructurando directivas, organizando consejos y haciendo los primeros acercamientos para posibles acuerdos. Incluso, se barajan algunos nombres.

Pachakutik empezó a elaborar un documento con la estrategia 2016-2021. En Cotopaxi, este 26 de julio se aprobará el reglamento definitivo en el que se incluye el capítulo ‘Estrategias inmediatas de participación política y electoral 2019’.

El brazo político del movimiento indígena es consciente de que no es fuerte en la Costa, por lo que trabaja en reestructurar las directivas regionales. Esta semana, en Guayaquil, se definirá la fecha del congreso nacional de Pachakutik.

La segunda fuerza política del país, CREO, que el viernes rompió la alianza con SUMA, está en el proceso de elección de las directivas provinciales. Los nuevos dirigentes serán proclamados el 31 de agosto, en lo que constituirá el punto de partida para la preparación de un proceso para escoger a quienes serán sus puntas de lanza en las elecciones seccionales.

Aunque desde ya en Quito y en Guayaquil, las dos ciudades más importantes del país, se hacen mediciones sobre la aceptación que tendrían los potenciales candidatos a la alcaldía, según una fuente cercana a esta organización política.

El Consejo Nacional Electoral (CNE) prevé aprobar el calendario de los comicios del 2019 a finales de este año, por lo que su elaboración ya está en proceso. De acuerdo con el Código de la Democracia, todas las candidaturas serán el resultado de elecciones internas.

Para el partido Avanza, estas serán una especie de ‘revancha’ por los últimos resultados electorales, pero también un reto por, al menos, mantener las alcaldías y prefecturas logradas en el 2014.

El director nacional de la agrupación, Ramiro González, le dijo a este Diario que el primer paso es reorganizar los cantones. El jueves fue el turno de Ambato y esta semana irá a Esmeraldas.

“Los que hacemos política sabemos que los malos resultados son cosas que pasan. Veamos cómo se va decantando la bronca interna en el movimiento PAIS. A raíz de eso, Avanza y otras organizaciones vamos a tener muchas posibilidades en las seccionales”, manifestó González.

Fuerza Ecuador (FE) adelantó que Abdalá Bucaram Ortiz podría terciar por la alcaldía de Guayaquil o la prefectura del Guayas. En tanto que Unidad Popular (UP) apunta a crear alianzas dentro de la tendencia, tal como lo hizo para las elecciones presidenciales de este año.

“Paco Moncayo es un nombre fuerte en Quito y podría aglutinar a varios sectores, pero hay nombres como el de Paula Romo o Natasha Rojas que podríamos proponer para la alcaldía”, comentó el director de la UP, Geovanni Atarihuana.

¿Qué perfil buscan en los candidatos? Todos coinciden en que sobre el aspirante no debe haber sospechas de corrupción. Wilson Sánchez, de Adelante Ecuatoriano Adelante, dijo que su partido busca líderes de base que no hayan sido señalados por actos irregulares. “Tampoco acudiremos a figuras conocidas de la pantalla porque el pueblo ya nos dijo que ese no es el camino”, declaró el dirigente.