Pachakutik aterriza en Guayaquil

Pachakutik aterriza en Guayaquil

Hoy, la organización le da un guiño a esta olvidada región. Guayaquil es la sede del Octavo Congreso Extraordinario Nacional del movimiento.

Hay una deuda y la reconoce. El movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik ha descuidado a la Costa ecuatoriana. No ha mirado con ambición política a la región con el mayor número de votantes (más de 5,6 millones registrados en las últimas elecciones seccionales), y las cifras lo evidencia: 4 autoridades locales electas por Pachakutik en 2014 de las 1.679 que estuvieron en disputa en las seis provincias costeras, de acuerdo a estadísticas del Consejo Nacional Electoral.

La dirigente indígena Lourdes Tibán hace un mea culpa. Reconoce que la organización descuidó a la Costa afianzándose en la Sierra y Amazonía. Lograr una mayor presencia costeña, dice la asambleísta, debe empezar con un cambio de mentalidad. “Pachakutik está catalogada como si fuera solo para indígenas. Pachakutik es para mestizos, montuvios. Es para todos”.

Hoy, la organización le da un guiño a esta olvidada región. Guayaquil es la sede del Octavo Congreso Extraordinario Nacional del movimiento.

El punto más importante en el orden del día será la elección del nuevo Comité Ejecutivo Nacional. Hay dos listas. La primera liderada por Marlon Santi, expresidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie); y la segunda, por Fanny Campos, actual coordinadora nacional quien busca la reelección.

El movimiento va con posturas contrarias a esta elección interna. Quienes apoyan a Santi creen que la organización debe retornar a su línea política que tomó otro rumbo bajo la dirección de Campos. Mientras quienes le apuestan a la aspirante a la reelección creen que Pachakutik debe ser más pluralista y abrir sus puertas al pensamiento distinto. Campos fue criticada por su acercamiento con el precandidato presidencial por el movimiento CREO, Guillermo Lasso.

Pese a las controversias internas, ambos aspirantes coinciden en la necesidad de apuntalar la presencia de la organización en la Costa y, de hecho, será una de las metas cualquiera que sea el ganador.

Santi promete que durante su primer año de gestión mirará con atención a las provincias costeras. Junto con los coordinadores provinciales elaborará una agenda de asambleas y eventos para iniciar un trabajo de estructura desde los barrios y parroquias.

La carta de presentación de Campos en esta región es su gestión: la reestructuración de las bases de la Costa y la posesión de coordinadores provinciales y en exterior. Sin embargo, reconoce el punto débil de la organización, apunta a su fortalecimiento y por eso Guayaquil es el punto de inicio.

En lo que también concuerdan Santi y Campos es que las elecciones presidenciales y legislativas de 2017 será una de las prioridades del próximo coordinador. ¿Irán solos o en alianza? ¿Con quiénes? Muchas respuestas dependen de una pregunta: ¿quién será el futuro coordinador?