Mundo

CHILE
El presidente chileno asegura que nueva ley recuperará la confianzaEFE

Boric espera "recuperar confianzas" con una nueva ley

Delitos económicos y ambientales serán sancionados por norma

El presidente de Chile, Gabriel Boric, promulgó este lunes 7 de agosto de 2023 una nueva ley contra delitos económicos y ambientales, iniciativa que a su juicio "contribuirá a recuperar las confianzas que se han dañado en estos últimos años", haciendo alusión a una serie de casos de corrupción que se han destapado en el país suramericano durante la última década.

eb4621982ae839f1f2c3b911495e3fd56cf88455w

Dos grandes incendios en Portugal provocan tres heridos leves

Leer más

“Desde hoy Chile tiene una nueva ley para sancionar de mejor forma los delitos económicos y ambientales, que tanto daño han causado a nuestra sociedad. Un daño que es difícil de cuantificar", afirmó el mandatario chileno.

"Por muchos años la ciudadanía ha visto con impotencia como los delitos de cuello y corbata suelen recibir castigos menores que otros delitos. Hay una percepción en la ciudadanía de que a veces parecieran existir dos justicias, una para ricos y otra para pobres.

Tenemos todos el deber de trabajar para que esa percepción no se asiente, y para que no sea real. La promulgación de esta legislación es un paso importante en esa dirección, y en la recuperación de la confianza en las instituciones”, subrayó el jefe de Estado.

Desde 2008 a la fecha, en Chile se han registrado decenas de casos de colusión empresarial, hechos que terminaron en multas millonarias pero que acrecentaron la sensación de desigualdad ante la ley denunciada por la población.

Empresas de retail, transporte interurbano, medios de comunicación, compañías dedicadas a la producción y venta de pollos, navieras, sociedades médicas, mercado de pañales y papel higiénico, entre otras, son algunas de las áreas que han protagonizado escándalos de colusión.

Tensión en Níger

Níger: Tensión por amenazas de los golpistas y el anuncio de reunión de la Cedeao

Leer más

“El sistema de penas no se ajustaba bien a los delitos económicos. Cuando se dictaba la condena muchas veces terminaba cumpliéndose en libertad, o la condena consistía en vergonzosas clases de ética. Recordamos el caso farmacias y otros casos de colusión. La señal que recibía la opinión pública es que este tipo de delitos recibía un trato distinto. 

El problema es que cuando la ciudadanía siente y ve que hay impunidad o una vara distinta para juzgar a unos o a otros, se debilita la confianza pública y la cohesión social”, señaló Boric.