Muerte de Mozart

su último año de vida, 1791, fue de gran productividad. Realizó numerosas composiciones, incluyendo algunos de sus trabajos más admirados: la ópera La flauta mágica, el último Concierto para piano y orquesta nº 27 en si bemol mayor, el Concierto para clarinete en la mayor, el último de su gran serie de quintetos de cuerda en mi bemol mayor, el motete Ave Verum Corpus y el inacabado Réquiem en re menor. La situación financiera de Mozart finalmente comenzó a mejorar.

Experimentó gran satisfacción por el éxito de algunos de sus trabajos, destacando La flauta mágica y la Pequeña cantata masónica. En marzo de 1791, Mozart ofreció en Viena uno de sus últimos conciertos públicos. Su último hijo, Franz Xaver, nació el 26 de julio. Mozart se sintió enfermo en Praga el 6 de septiembre, durante el estreno de su ópera La Clemenza di Tito. Al regresar a Viena, angustiado e hiperemotivo, recibió el encargo anónimo del Réquiem y lo tomó como una premonición de su muerte. En octubre su salud empeoró; caminaba con su esposa por el Prater cuando de pronto se sentó en un banco con dolores. El 20 de noviembre la enfermedad se intensificó y cayó postrado en cama, sufriendo hinchazón, dolores y vómitos. El 5 de diciembre de 1791, aproximadamente a las doce de la madrugada, llegó el doctor Closset y ordenó que le pusieran compresas frías de agua y vinagre sobre la frente para bajarle la fiebre. Perdió el conocimiento y no volvió a recuperarlo hasta su muerte. A las doce y cincuenta y cinco minutos de la madrugada, Mozart falleció en Viena a la edad de 35 años, 10 meses y 8 días. Fue amortajado según el ritual masónico (manto negro con capucha). El entierro de Mozart fue de tercera categoría, con un coste de ocho florines con cincuenta y seis kreutzer (más un suplemento de tres florines para pagar el coche fúnebre). Fue enterrado al anochecer, en el cementerio de St. Marx, en Viena, en una tumba comunitaria simple (no en una fosa común). El biógrafo Otto Jahn afirmó en 1856, que al entierro asistieron Antonio Salieri, su alumno Süssmayr, Gottfried van Swieten y otros dos músicos.

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