Apoyo. El volante Gylfi Sigurdsson fue a festejar con Jefferson Montero (derecha) tras la única anotación del partido, ayer.

Montero se abre un lugar

Jefferson Montero obligó al entrenador del Swansea, Francesco Guidolin, a cambiar su criterio rotundamente.

Y lo hizo con fútbol. Ayer estuvo 83 minutos en la victoria 1-0 de los ‘Cisnes’ sobre el Chelsea. El ecuatoriano inició la jugada lanzando un centro que fue mal rechazado por la defensa azul. Allí aprovechó su compañero, Gylfi Sigurdsson, para anotar a los 25 minutos.

Pero no fue solo esa participación, durante la mayor parte del compromiso el tricolor fue un dolor de cabeza para la defensa rival. Sus típicos desbordes fueron una de las principales armas de ataque del equipo galés. Pero además, mostró una imagen más solidaria, retrocediendo varios metros para apoyar en la defensa.

En dos semanas, Montero ha dado la razón a la prensa de Gales, que presionó con encuestas a los hinchas e insistentes preguntas al técnico italiano sobre las pocas posibilidades que tenía el nacional.

Y Francesco Guidolin accedió. En ese lapso pasó de una negativa casi definitiva a contar con él como titular.

Apenas hace catorce días señaló que Montero debía mejorar su juego para tener un espacio en el equipo. Se refugió también en el tipo de formación, con un rombo en la mitad de la cancha, para explicar que no tenía posibilidades de jugar.

Pero bastaron 30 minutos en la fecha anterior contra el Stoke City para que Guidolin empiece a reconsiderarlo.

Ya lo dijo al inicio de esta semana, el futbolista ecuatoriano le ha demostrado que puede ser desequilibrante a favor de los suyos y que estaba pensando en la posibilidad de cambiar el dibujo de su plantel, olvidarse del rombo y apostar por extremos. Esta vez le dio resultado porque Swansea ganó, se alejó definitivamente del descenso y Montero está recuperando su lugar entre los titulares. Todos felices.

Jefferson Montero obligó al entrenador del Swansea, Francesco Guidolin, a cambiar su criterio rotundamente.

Y lo hizo con fútbol. Ayer estuvo 83 minutos en la victoria 1-0 de los ‘Cisnes’ sobre el Chelsea. El ecuatoriano inició la jugada lanzando un centro que fue mal rechazado por la defensa azul. Allí aprovechó su compañero, Gylfi Sigurdsson, para anotar a los 25 minutos.