Los malos hinchas del futbol

Los clásicos en tiempos parados, con 73 años, fueron mejores. Eran una fiesta deportiva, en unión de la familia y amigos; por eso, el fútbol es pasión de multitudes.

La FEF se convirtió en el órgano que mide el reglamento y determina la peligrosidad de un partido. Así, el último juego entre Barcelona y Emelec, que en esta etapa final del campeonato nacional tiene especial importancia, se realizó sin la hinchada del equipo visitante.

Me preocupa que unos pocos hinchas tengan la calidad de vandálicos. La realidad existe, ya que son garroteros, delincuentes, destructores de cosas, drogadictos, entre otros.

Lic. Robespierre Rivas R.