Una ‘final’ en la nueva Caldera

Terminaron los días de nómadas, el tricampeón del balompié nacional regresa a casa. Hoy, Emelec tendrá a 30 mil almas coreando y saltando su nombre en la búsqueda de la clasificación a octavos de final contra el Deportivo La Guaira de Venezuela, club que en la ida se impuso 4-2.

Primer reto en la nueva ‘Caldera’: dar vuelta el resultado negativo que obtuvieron en el estado de Lara, en el país bolivariano. Más que una simple clasificación a octavos, para Emelec estos 90 minutos son una final.

Luego de resbalar como local en la última fecha del campeonato local, tras igualar a 2 contra El Nacional y quedar a cinco puntos del líder (Barcelona), los eléctricos inclinan sus fuerzas a la Copa Sudamericana.

El trofeo internacional es aquella asignatura pendiente que tiene la dirigencia encabezada por Nassib Neme y esta plantilla. Con esta base, se proclamó tricampeón del fútbol ecuatoriano, pero la gloria internacional continúa en deuda.

Alfredo Arias tiene una tarea complicada, no dejar que el equipo visitante estrene este nuevo fortín; y en este objetivo deberá hallar el reemplazante idóneo para el volante de contención, Pedro Quiñónez, quien es baja por lesión.

Las opciones que tiene Arias son Osbaldo Lastra, Fernando Giménez, Henry León y Eddy Corozo, estos dos últimos están descartados; el primero por lesión y el otro no entró a la convocatoria final del DT charrúa. Después de esta incógnita, Emelec tendrá a todos sus caudillos disponibles.

Aquel romanticismo entre la gente azul y los murales de la ‘Caldera’ se juntan de nuevo. No importa comprar el boleto a $ 10 en la reventa, porque en boletería se habían agotado, la Boca del Pozo volverá a gritar en las bandejas de la avenida Quito. La platea de la General Gómez bailará al ritmo de los miembros de la Che Pérez, mientras que miles de hinchas eléctricos pisarán el nuevo edificio ubicado en la tribuna San Martín. No hay margen de error en esta ‘final’.