Según el presidente, esa deuda no incluye otras obligaciones que en su conjunto reflejan un “grave endeudamiento”.

Lenin Moreno reconoce “grave endeudamiento” del pais

En su discurso, de nueve minutos de duración y transmitido por todas las cadena nacional, no dudó en calificar la situación como “crítica” porque “desde hace dos años el país enfrenta condiciones difíciles producto de la reducción del precio del petról

El presidente Lenín Moreno, reconoció este viernes 28 de julio que la situación económica del país es “extremadamente difícil” y que se necesitarán 8.000 millones de dólares anuales para amortizar la deuda que encontró al llegar al poder.

“En mayo de este año la deuda pública histórica del país, que incluye los gobiernos locales, alcanzó un monto agregado de los 41.983 millones de dólares”, dijo Moreno en un discurso a la nación transmitido por televisión.

Según el presidente, esa deuda no incluye otras obligaciones que en su conjunto reflejan un “grave endeudamiento” y un “grave escenario”.

“Existen otros pasivos del Estado como operaciones de corto plazo, pasivos de empresas petroleras, ventas anticipadas de hidrocarburos que, entre otras, suman un monto aproximado de 8.000 millones adicionales”.

“Además, registramos contingentes que hoy no son deuda, pero que podrían transformarse en obligaciones de pago, que suman 4.367 millones dólares”, señaló al hacer una análisis del endeudamiento nacional que ha heredado de su predecesor, Rafael Correa.

Igualmente presentó la Proforma Presupuestaria del año 2017 que enviará la Asamblea Nacional para su aprobación. Según Moreno hasta el 30 de mayo se había ejecutado el 33,2% y comprometido el 36,2%.

Esta proforma asciende a $ 36.818 millones, que representan un crecimiento del 2% respecto del presupuesto codificado del año anterior.

Dentro de las deudas, Moreno también incluyó la demanda de la Contraloría General del Estado de que se registren los 2.528 millones que el Estado le debe al Instituto de Seguridad Social IESS.

“A esto debemos añadir las obligaciones por pagar en incentivos a la jubilación, que ascienden a alrededor de 1.000 millones de dólares”, subrayó al asegurar que su gobierno garantizará los derechos de afiliados y jubilados pese a la situación.

En su discurso, de nueve minutos de duración y transmitido por todas las cadena nacional, no dudó en calificar la situación como “crítica” porque “desde hace dos años el país enfrenta condiciones difíciles producto de la reducción del precio del petróleo y de los bajos precios de las materias primas”.

También lo atribuyó a “la apreciación del dólar” y a los “efectos devastadores del terremoto de 2016”.