
“Pense que seria mas facil”
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reflexionó ayer sobre sus primeros 100 días de mandato con una visión nostálgica de su vida antes de la Casa Blanca.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reflexionó ayer sobre sus primeros 100 días de mandato con una visión nostálgica de su vida antes de la Casa Blanca.
“Me encantaba mi vida previa. Pasaban tantas cosas”, declaró Trump a Reuters en una entrevista exclusiva. “Tengo más trabajo que en mi vida previa. Pensé que sería más fácil”. El mandatario echa de menos su vida anterior y hasta conducir su propio coche.
Trump, un acaudalado empresario de Nueva York, asumió el cargo el 20 de enero tras derrotar a la demócrata Hillary Clinton en una sorpresiva victoria electoral.
Aunque dijo que estaba acostumbrado a no tener privacidad en su “vida anterior”, manifestó su sorpresa por lo poca que tiene ahora. Además, dejó claro que aún se está acostumbrando a tener la protección del servicio secreto las 24 horas del día, con sus inherentes limitaciones.
Durante esta primera etapa en la presidencia, de la que Trump se congratula, no logró ninguna victoria legislativa importante y tiene los índices de aprobación más bajos para un presidente nuevo en la historia reciente.
Una nueva encuesta de CNN/ORC revela que el mandatario llega a este hito con el nivel de aprobación más bajo que ha registrado un gobernante recién elegido en esta etapa.
En general, 44 % de los encuestados aseguró que aprueba la manera en que Trump ha manejado la presidencia, en contraste con un 54 % que lo desaprueba. Cifras muy similares a las que registraron los dos sondeos previos de CNN/ORC, que se realizaron después de su toma de posesión.
Sin embargo, ese 44 % pone a Trump en el último lugar de los niveles de aprobación que han recibido los presidentes recién elegidos durante sus primeros 100 días, desde que empezó la era moderna de las encuestas: una tendencia que se remonta a Dwight Eisenhower. Y el magnate ocupa esa posición con un amplio margen de 11 puntos frente al penúltimo lugar ostentado por Bill Clinton.
La visión del mandatario es diferente. “Vamos terriblemente bien, hemos hecho muchas cosas”, dijo ayer durante la firma de un decreto en la Sala Roosevelt de la Casa Blanca.
Opinión que constraste con el decepcionante comienzo de la presidencia de Trump en términos financieros. La economía de Estados Unidos tuvo su peor crecimiento en tres años para un primer trimestre.
Todos estos detalles colorean el dibujo de los primeros 100 días de presidencia Trump, una imagen donde los trazos gruesos siguen siendo un posible conflicto “grave” con Corea del Norte, los dos ataques en Siria y Afganistán, el fracaso de la reforma sanitaria o la falta de financiación para el muro en la frontera con México.
Pero también han desvelado detalles curiosos del republicano. Como por ejemplo que pide una Coca Cola pulsando un botón en su mesa de trabajo. Un periodista de Financial Times le pregunta, mitad en broma, mitad en serio, si el interruptor rojo es el llamado “botón nuclear”. “Todo el mundo piensa lo mismo. Todo el mundo se pone un poco nervioso cuando lo aprieto”, responde el mandatario estadounidense. Pero, al otro lado del interruptor, un camarero de la Casa Blanca responde a la orden de traer al presidente su bebida favorita.
El presidente que un día presumió de que su mesa estaba más llena de papeles que la de ninguno de sus antecesores y ahora la mantiene impoluta, dice ahora que el trabajo es más complicado de lo que se imaginaba.
Salud
La promesa de anular y reemplazar la Ley de Cuidados de Salud Asequibles (ACA, por su sigla en inglés), la política doméstica clave del presidente Barack Obama, fue una de las principales de la campaña de Trump, pero también ha sido uno de los mayores fracasos.
Impuestos
Trump prometió reiteradamente cambiar el sistema impositivo con la mayor reforma desde la década del 80. Esta semana propuso leyes para bajar los impuestos corporativos. El plan es vago e incluso legisladores republicanos lo describieron como “indicaciones” para cambios legislativos.
Diplomacia
La política exterior de Trump ha sido confusa. Con Rusia, el acercamiento se ha enfriado; Siria, prometió evitar participar en los conflictos en Oriente Medio, pero respondió al ataque con armas químicas; y Corea del Norte, el más serio desafío de seguridad de Trump por la amenaza nuclear.
Migración
Trump prometió una ofensiva contra inmigrantes ilegales y la construcción de un muro y que México lo pagara. La fuerte retórica influyó en el número de inmigrantes que intentaron ingresar al país ilegalmente, cuyo porcentaje cayó a mínimos de 17 años en marzo.
Comercio
El Gobierno de Trump retiró a EE. UU. del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica días después de asumir el cargo, y amenazó con retirarse del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) a menos que se renegocie con importantes cambios.
Nacionalismo
Prometió evitar que las compañías estadounidenses trasladen empleos al exterior. Incluso usó su victoria electoral para convencer a empresas de no llevar más empleos a México. Además ordenó revisar el programa de visas H-1B, que permite el ingreso de trabajadores calificados a EE. UU.