“No es el ‘partido’ sino el ‘proyecto’ o el ‘modelo’”

La división de poderes del Estado crea pesos y contrapesos que impiden entronizar bandas delictivas en la esfera política, dice John Saul. En Caminos de utopía, Buber atribuye el fracaso de los gobiernos de partido único a la sistemática colusión de complotados sin rendición de cuentas. Cuando un solo partido se apodera de todo el Estado, la quiebra del sistema es inevitable debido al dispendio presupuestal. Esto se extiende al socialismo del siglo XXI que agoniza en la peor corrupción de la historia latinoamericana tras el saqueo de la última bonanza de materias primas. Los publicistas prohíben usar la palabra ‘partido’ para ocultar el monopolio total. Lo llaman con eufemismos el ‘proyecto’, ‘modelo’.

Paul Tapia Goya