“Indiferencia o ceguera de la Justicia”
Es común escuchar: “hay que estar ciego para no darse cuenta” o “hacerse de oídos sordos”. Se utilizan para expresar indolencia o apatía frente a situaciones o asuntos a los que no se da la debida importancia. Hay indiferencia ante temas trascendentales que suceden en nuestro país.
La justicia debe considerar en la misma magnitud los acontecimientos que se produjeron en octubre, tanto el incendio provocado en la Contraloría, como el atentado a los derechos humanos y a la dignidad de los ciudadanos involucrados. Escuchar frases peyorativas como patojo a una persona que se moviliza en silla de ruedas, o que a una mujer la obligaran a desnudarse delante de un público indignado, creyéndose con derecho de humillarla o imponer el caminar sin zapatos a varios miembros de la Policía, son violaciones a los derechos humanos y la justicia debe actuar.
Los administradores de justicia y los defensores de los DD.HH. reúnen todas las discapacidades, incluyendo la cerebral, con el perdón de las personas que la padecen. ¿Dónde están las organizaciones de mujeres defensoras de su género, que llenan calles cuando manifiestan una inconformidad? ¿Será que esta dama no tiene derecho por llevar uniforme? Soy ciego de nacimiento y me solidarizo con todas las víctimas, sin importar de qué lado estuvieron.
Víctor Hugo L. Sánchez