“Los buses de transporte urbano son un riesgo para los adultos mayores”

Viviendo en Urdesa Central y necesitando en horas de calor utilizar un vehículo para transportarme, he tratado de usar las diferentes líneas que tienen el recorrido por la Victor Emilio Estrada.

Para el adulto mayor o señoras con niños en brazos es un riesgo. El bus moderno, con dos puertas, una para subirse, que hay asientos asignados a la tercera edad, que son los primeros al ingresar al transporte, un letrero indica que la bajada es por la puerta de atrás.

Para experimentar el servicio cogí un bus en la VEE e Ilanes, tenía que quedarme en las Monjas. Me apresuré a dejar el asiento de adelante para ubicarme en uno de los asientos de atrás, para bajarme. Pulsé el timbre en Las Monjas. La puerta se abrió, había bajado un escalón, el bus aceleró seguramente para que no le coja la luz roja, el susto fue grande tanto para mí, como para los pasajeros, que presenciaron el riesgo en que estuve de caerme.

Si están dando preferencia a los adultos mayores y señoras con niños en brazos, o con alguna incapacidad, estas personas deberían bajar por la puerta de adelante, que nos brinda seguridad pues el conductor nos está viendo.

En la noche es más serio el asunto y en las horas pico, los buses están llenos. ¿Cómo puede el conductor ver si todos los pasajeros ya están fuera del carro? No son buses que ofrecen seguridad, en estos momentos, para el adulto mayor.

Laura E. Gómez Serrano