Actualidad de Juan Montalvo

En 1920, el presidente del Ecuador, doctor Alfredo Baquerizo Moreno, estableció como Día del Maestro Ecuatoriano al 13 de abril, fecha del natalicio en Ambato, el año 1832, de don Juan Montalvo Fiallos.

Merecido y postergado homenaje recibió entonces la memoria del ilustre compatriota, que había muerto en París el año 1889 y ahora descansa en un hermoso mausoleo, construido en su tierra natal en ocasión del primer centenario de su nacimiento, luego de permanecer enterrado en Guayaquil hasta 1932.

Cuando la Sociedad Interamericana de Prensa acaba de señalar que en el Ecuador se han perdido las garantías de la libertad de expresión y solicita al Gobierno nacional que “cesen las agresiones contra periodistas, editorialistas y medios de comunicación independientes”, bien hace el país en recuperar para la memoria colectiva el recuerdo de la fecunda acción de defensa de la libertad de expresión que en Montalvo tiene una de sus figuras más relevantes, puesto que su lucha generó un patrimonio intelectual irrenunciable.

En efecto, en una de sus más célebres publicaciones, que incluso dio lugar a que se lo conozca con ese apelativo: El Cosmopolita, Montalvo hace, desde el primer número, que precisamente está cumpliendo el sesquicentenario de su aparición, una cerrada defensa de la libertad de expresión, estableciendo con el vigor característico de su “pluma de acero”, que solamente se reprime dicha sacrosanta libertad en los gobiernos que aspiran a ser tiranías o ya la han constituido.

Sin duda, la audacia de su lucha por las libertades, más allá de su reconocida contribución a dar lustre a las letras hispanoamericanas, es una condición a seguir relievando.

No era fácil oponerse a un régimen de la arbitrariedad del que constituyó García Moreno. El ambateño no titubeó en hacerlo y su ejemplo sembró voluntad democrática y pasión libertaria en las nuevas generaciones de su tiempo.

Válido es procurar que las actuales se sigan nutriendo con ese fuego sagrado y por ello, desde la Casa de Montalvo, en Ambato, donde hoy se realizará como en cada aniversario una sesión de homenaje, pero también en todo el territorio que el contribuyó a constituir como una patria libre, deberá seguirse pregonando su pensamiento libérrimo, su irrenunciable adhesión a principios de valor eterno.