Inició el debate. Luego de que el ministro de Trabajo, Andrés Madero, diera a conocer los tres primeros acuerdos a los que llegaron con los representantes de los trabajadores y empresarios para reformar el Código de Trabajo, ya se discute si los cambios pueden ser beneficiosos.

El que más ha llamado la atención tiene que ver con la flexibilidad para cumplir con las 40 horas de jornada laboral.

La idea ahora es que esas 40 horas semanales puedan ser trabajadas en seis días o menos con un máximo de 12 horas laborales por día (ver gráfico).

¿Qué sectores o segmentos económicos podrían utilizar la flexibilidad en la jornada laboral? El presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), Patricio Alarcón, aseguró que esta propuesta, principalmente, puede beneficiar a la industria.

“Puede ser que con las ocho horas no alcancen lo suficiente a producir con la cantidad suficiente de personal. Entonces se puede extender unas horas más y adelantar la producción y además le deja tres días y medio libres para contratar a más gente”, dijo Alarcón.

Asimismo, locales comerciales podrán beneficiarse cuando existan más flujos de clientes, según el titular del CEE, porque podrán dejar abiertos sus locales más tiempo, sin tener que pagar horas extras.

El sector de servicios también podrá extender sus días de trabajo con mayor eficiencia, aseguró Roberto Estrada, socio de la consultora Deloitte. Por ejemplo, los bancos o empresas de telecomunicaciones.

“Esto va a crear muchas perspectivas para las personas, especialmente para los más jóvenes, para que puedan administrar su carga laboral, en consenso con la empresa”, aseguró el ejecutivo.

Los consensos anunciados el pasado miércoles por el ministro Madero deberán recogerse en un proyecto de ley para reformar el Código de Trabajo y deberán ser aprobados por la Asamblea.

El Gobierno tiene previsto enviar el proyecto en el primer semestre del año y una de las posibilidades es que se incluya en la denominada Ley de Fomento Productivo II. Es probable que todo el cuerpo legal sea presentado el 24 de mayo, en la rendición de cuentas de Lenín Moreno.

Reformas para impulsar el emprendimiento

La segunda reforma anunciada el pasado miércoles, tiene que ver con la creación de un contrato especial para emprendimientos y nuevas inversiones, dirigido a todo tipo de negocios, sin importar su tamaño.

Por ejemplo, si una nueva empresa no logra prosperar y cierra, el empresario no estará obligado a pagar a sus trabajadores indemnizaciones por concepto de despido intempestivo. Pero sí tendrá que asumir lo correspondiente al desahucio, indicó Madero.

La tercera reforma laboral consiste en eliminar el recargo del 35 % en los contratos eventuales y ocasionales. Según Madero, dicho recargo desalienta estas contrataciones. Tendrá validez para los contratos que duren hasta 180 días, más allá de ese tiempo el contrato pasa a ser indefinido.