Plegarias. Los manifestantes, en su mayoría mujeres, concentrados en los exteriores del Consejo Nacional Electoral hicieron un alto a su protesta para arrodillarse y hacer oraciones.

Los irreductibles de Quito

La madrugada de ayer un recolector de basura fue obligado a dejar desperdicios a 200 metros del Consejo Nacional Electoral.

No solo los quiteños protestan en los exteriores del Consejo Nacional Electoral (CNE). Guayas, Manabí, Esmeraldas, Bolívar, Loja, Los Ríos, Imbabura, Cotopaxi, Napo y Tungurahua son, entre otras, las provincias que tienen representantes en la acción que inició el domingo pasadas las 15:00.

En su mayoría son simpatizantes del binomio presidencial de Guillermo Lasso y Andrés Páez, de CREO-SUMA.

No son novatos. Durante la primera vuelta muchos ya hicieron una plantonera en el lugar. Esta vez, sin embargo, no solo piden transparencia en los resultados, sino que exigen un reconteo de votos.

Tienen 13 carpas para protegerse del sol y de la lluvia y al menos ocho baterías sanitarias.

También tienen a su disposición una tarima, un micrófono y parlantes para expresar su malestar. Ayer, por ese lugar pasaron más de 15 personas hasta el mediodía. “Hay valentía de sobra porque todos queremos seguir viviendo en libertad”, fueron las palabras de Fernando Torres Bejarano, empresario agrícola. Él está en la protesta con familiares y amigos.

Dijo a EXPRESO que está frustrado con los resultados del CNE porque cree que su libertad está en juego. Decidió viajar a Quito el lunes por la tarde porque “uno siente que allá no hace nada, acá es donde las papas queman”, destacó.

El empresario teme que la economía nacional empeore en los próximos meses. En su empresa trabajan alrededor de 200 personas.

No muy lejos de Torres, dos mujeres pedían a los manifestantes “volver los ojos a Dios”. Algunos se arrodillaron y otros elevaron sus manos al cielo.

Como recordatorio, Verónica Vaca, integrante de un grupo de oración, dijo que “las malas palabras no se escuchan en el cielo”. Ella sucedió a Ximena Pozo que minutos antes pidió orar por el país a los asistentes.

Las dos fueron parte de las decenas de personas que durante la mañana tomaron el micrófono y dirigieron mensajes por tercer día consecutivo.

José Lovato, originario de Chone, se quejó de los altos impuestos y pidió “un Ecuador democrático”. Jenny Mafare, de Esmeraldas, insistió en que “este Gobierno es indolente”.

Andrés Páez fue el que más habló. Por media hora, dijo que su consigna es ‘la patria o la tumba’. También ofreció mostrar las pruebas del presunto fraude. Capturas de pantalla del sistema del conteo del CNE antes y después de la caída de la página, por ejemplo.